Esta semana se celebra Nochebuena, Navidad y el Año Nuevo, que en esta ocasión será de forma atípica por la pandemia del coronavirus, por eso el Dr. Felix Drexler, del Hospital Charité de Berlín, recuerda que hay que tomar en cuenta las medidas de cuidado durante las celebraciones y no bajar la guardia, y es que la forma tradicional en la que estábamos acostumbrados a celebrar estas fiestas sería un escenario ideal para la propagación del virus.
Si bien el aislamiento obligatorio estricto en Latinoamérica quedó atrás después de registrarse una disminución de los contagios, estos se están volviendo a incrementar en algunos países de la región. En los últimos días, los mercados y centros comerciales lucen abarrotados de gente en busca de las mejores ofertas, pero sin mantener el distanciamiento social recomendado. Para evitar focos de contagio, algunos países ya han anunciado restricciones durante los días festivos. Ante esta situación, el Dr. Felix Drexler ofrece seis recomendaciones para pasar estas fiestas de manera segura y minimizar el riesgo de contagio:
1. Extremar medidas los días previos
«Se puede reducir el número de personas con las que uno se encuentra, extremando así las medidas de seguridad los días previos. También está la opción de mantenerse en cuarentena voluntaria antes del encuentro familiar para, justamente, minimizar el riesgo de contagiar a los demás familiares. En algunos casos se podría hacer un test antes de la reunión familiar. Sin embargo, aquí hay que tener mucho cuidado, porque, obviamente, una persona puede ser negativa hoy y positiva al día siguiente, corriendo el riesgo de una falsa seguridad».
2. Celebrar de forma menos consumista
«Si bien hoy en día todo se puede comprar en línea, en América Latina a veces tenemos miedo o dudas de comprar en Internet. De todas formas, se debería celebrar de forma menos consumista. Hay que evitar tumultos de personas en las tiendas, mercados o centros comerciales pocos días antes de las festividades en una de las épocas de mayor consumo».
3. Festejar en grupo reducido
«Los Gobiernos regionales en Alemania han dictaminado reuniones que no superen entre las 5 y 10 personas, pero, en general, más que dar números, hay que tener conciencia de que puede ser una ventaja para todos minimizar los contactos y festejar en un grupo reducido en casa entre los miembros de una misma unidad familiar. Otra opción sería usar mascarilla dentro del hogar, además del distanciamiento físico de 1,5 metros y, obviamente, desinfectarse. No hay que olvidar que por medio de las gotículas de saliva se puede transmitir el virus».
«También se podría utilizar mesas separadas, sin abrazos ni choques de copas. El contacto cercano o el cantar juntos puede aumentar el riesgo de contagio. Hay que tener en cuenta que algunas personas, especialmente las más ancianas, pueden quedarse muy aisladas, si los excluimos o si cancelamos todas las actividades».
4. Especial cuidado con los grupos de riesgo
«Más que nada, hay que evitar el riesgo de contaminar a los mayores de 60 años y a los que pertenecen a los grupos de riesgo, que son los más vulnerables. Sobre todo, tenemos que apelar a la conciencia de cada uno, de hacer todo lo posible para poder realizar ciertas actividades con seguridad para todos. La idea es que los más jóvenes, que tienden a tener más contactos por el trabajo o por tener hijos en edad escolar, intenten hacer una protección personal en sus casas. Es decir, una ‘mini cuarentena’ con un cuidado especial para justamente no infectar a las personas en riesgo durante las fiestas».
5. La ventilación es importante
«Sería preferible reunirse al aire libre, pero si se hace en casa, no hay que olvidar que la ventilación siempre es muy importante. No obstante, esto no se puede generalizar en América Latina, porque depende mucho de cada casa. En un mismo país también se puede tener regiones completamente distintas con climas diferentes. Pero hay que enfatizar que la ventilación de un lugar cerrado cada cierto tiempo es muy importante. Esto ayuda a que la carga viral no se acumule en el lugar».
6. Evitar playas al día siguiente
«Hay mucha gente en América Latina que acostumbra ir a la playa el día de Navidad o Año Nuevo, pero tienen que saber que el virus no va a respetar y no va a ser distinto en estas épocas. Si uno va a las playas, donde hay muchas otras personas, es como ir a plazas centrales. Hay que tener en cuenta que puede haber el mismo riesgo de contagio que en cualquier otra situación o época del año. Por eso, hay que guardar las mismas precauciones de antes. Lamentablemente, la gente en la región está perdiendo un poco el cuidado».
«Durante la fuerte primera ola en América Latina, dijimos que sería bueno que los países europeos, incluyendo Alemania, miren lo que pasa en los países latinoamericanos para mejorar las estrategias. Ahora es al revés, y es importante que los latinoamericanos miren lo que está pasando en Europa en la segunda ola».
Estas recomendaciones del Dr. Drexler llegan ante el temor de que, durante la Navidad o el Año Nuevo, o tras ellas, se produzca una nueva oleada del virus, cuando las primeras vacunas contra la enfermedad podrían tardar aún meses en estar disponibles en América Latina y el Caribe y al principio solo sería administradas a los grupos de riesgo.
El Dr. Jan Felix Drexler, virólogo y profesor de la prestigiosa Clínica Universitaria Charité de Berlín, es consejero científico de la Corporación Alemana para la Cooperación Internacional (GIZ) y dirige delegaciones que ayudan a los Gobiernos latinoamericanos en su lucha contra el nuevo coronavirus. Drexler tiene amplia experiencia profesional en América Latina, donde también llevó a cabo proyectos para combatir el zika. Fuente DW