En medio de una ola de calor sofocante en el oeste de los Estados Unidos, un lugar remoto en Death Valley, California, se ganó el título del lugar más caluroso de la Tierra en casi un siglo.
La semana pasada, el lugar del Valle de la Muerte, propiamente llamado Furnace Creek, con una población de 24 personas, registró una temperatura de 130 ° Fahrenheit (54,4 ° Celsius). Si es verificada por la Organización Meteorológica Mundial, o OMM, esa temperatura será la más caliente registrada desde 1931, y la tercera más caliente desde que se empezó a llevar un registro.
Furnace Creek también tiene el récord de temperatura más alta registrada en la Tierra, registrada en 1913, la cual fue de 134 ° F (56,7 ° C). En segundo lugar está Kebili, Túnez, con una temperatura registrada de 55,0 ° C (131 ° F) el 7 de julio de 1931.
El proceso de verificación de tales registros globales de fenómenos meteorológicos extremos, que se archivan en la OMM, puede llevar meses, dice el jefe de archivo, Randall Cerveny, meteorólogo de la Universidad Estatal de Arizona en Tempe (SN: 1/7/20). Para fundamentar un registro, un comité internacional de científicos atmosféricos estudia detenidamente las observaciones originales, el equipo utilizado para realizarlo y las prácticas de calibración. Pero «según la evidencia disponible, estamos aceptando preliminarmente la observación», dice Cerveny.
Algunos científicos han cuestionado la observación de 1913. En 2016, un análisis publicado en línea en Weather Underground sugirió que la temperatura registrada «esencialmente no era posible» en función de las condiciones meteorológicas, incluido que no había evidencia de una ola de calor particularmente intensa de ninguna otra estación en el área en ese momento. Por ahora, sin embargo, el récord permanece, porque «no se ha presentado a la OMM ninguna evidencia sustancial creíble» que respalde esta afirmación, dice Cerveny.
Existe un precedente de que los registros anteriores se desestimen. En 2012, la OMM determinó que lo que entonces se pensaba que era la temperatura más alta registrada, una observación de 1912 de 57,8 ° C (136 ° F) en Libia, no era válida. Eso fue respaldado por el descubrimiento en 2010 de la hoja de observación original, mal registrada, con cinco errores separados.