En Brasil la Suprema Corte de Brasil avaló que la vacuna contra la COVID-19 sea obligatoria en el país, incluso permitirá imponer sanciones para quienes se nieguen a aplicársela, sin embargo, el presidente Jair Bolsonaro poniendo un mal ejemplo aseguró que no se vacunará.
El mandatario brasileño expuso que tiene anticuerpos contra el coronavirus, debido a que él ya tuvo la enfermedad, pero esto aunque sea cierto, no le impide volverse a contagiar, pues son varias cepas las que se han detectado del nuevo coronavirus, tal y como lo informó la propia Organización Mundial de la Salud.
Bolsonaro dio positivo a COVID-19 el pasado 7 de julio y anunció su recuperación el 25 de julio.“Yo no la voy a tomar. Algunos hablan de que estoy dando un mal ejemplo. ‘El imbécil, el idiota’, me dicen. Yo ya tuve el virus, yo ya tengo anticuerpos, ¿para qué tomar una vacuna de nuevo?”, dijo.
“La vacuna una vez que sea certificada será extensiva a todo aquel que quiera tomarla. Yo No lo haré. Pfizer en el contrato dice que no es responsable de ningún efecto colateral. Están jugando con nuestro sistema inmunológico” apuntó Jair Bolsonaro
Además, el mandatario arremetió contra la vacuna de Pfizer, debido a que la empresa no se hace responsable de los efectos secundarios que pudiera causar su fármaco, otra razón por la cual no se la aplicará: “El contrato con Pfizer está claro. No se responsabilizan de cualquier efectos secundario. Si te conviertes en mono, si te conviertes en cocodrilo es tu problema”, aseguró Bolsonaro luego de que la Corte Suprema de Brasil avaló que la vacuna contra la COVID-19 sea obligatoria; a lo que él expuso que no obligará a nadie a vacunarse.
Brasil es uno de los países del mundo más castigados por la pandemia, junto con Estados Unidos e India, y hasta este jueves contabilizaba 7.1 millones de contagios y cerca de 185 mil muertes relacionadas con el coronavirus. Con información de la Agencia EFE