Gracias a la creatividad de los empresarios, y a la innovación para seguir funcionando pese a las medidas de confinamiento derivadas de la pandemia, el concepto “Drive Thru” ya no se aplica únicamente en comida para llevar. Un club de striptease en Oregon, se vio en la necesidad de alterar su modelo comercial para ayudar a sus empleados a seguir generando ingresos durante la crisis, por lo que se dieron a la tarea de crear una nueva experiencia para los conductores: un show del club de striptease, en el que los bailarines se encuentran en el estacionamiento del local.
Shon Boulden, propietario del Lucky Devil Lounge en Portland, Oregon, le dijo a una televisora de difusión nacional en Estados Unidos, que la idea del nuevo camino para autos de su club surgió después de que una compañía local de eventos lo contactó.
Boulden dijo que los empleados de la empresa del evento también estaban sin trabajo debido al cierre, pero que estaban dispuestos a trabajar con Lucky Devil Lounge para crear una nueva experiencia en el estacionamiento del club. Boulden dijo que reflexionó sobre la idea durante aproximadamente una semana.
«No quería atraer la atención equivocada», explicó. Él dice que su club ha estado siguiendo un estricto protocolo de seguridad desde que estalló la noticia del brote, y no quería hacer algo que pareciera que no lo están tomando en serio.
Después de encontrar una manera de llevar a cabo la idea mientras se mantiene a los bailarines seguros y se mantiene el distanciamiento social, Boulden dijo que el estacionamiento del club se transformó con carpas, escenarios, equipos de música y barricadas.
Después de configurarlo, invitó a algunos amigos y compañeros de trabajo a probarlo. Instaló una GoPro en la parte superior de su automóvil y condujo. Cuando revisó el metraje, dijo, fue «increíble».
«Me recordó a conducir por una casa embrujada», dijo. «Hay luces, niebla y una bola de discoteca gigante».
Cómo funciona: el auto se detiene y el DJ comienza a tocar una canción. Varios bailarines, con guantes y máscaras faciales, actúan durante la duración de una canción y luego llevan la comida del cliente a su automóvil. El club incluso tira un rollo de papel higiénico gratis (otro elemento que ha tenido una gran demanda desde el brote).
«La gente está muy entusiasmada», dijo Boulden. «Están felices de ver a otros seres humanos y de tener la experiencia del club de striptease». Un grupo incluso viajó desde Seattle para experimentar el recorrido en automóvil, y al menos un cliente regular condujo tres veces en una noche, dijo Boulden.
«Los bailarines están felices de trabajar y ser etiquetados como trabajadores esenciales», dijo Boulden.
