Un grupo de científicos de la Universidad de Cambridge informó que ha descubierto el secreto de por qué algunas personas son flacas mientras que otras suben de peso con mucha facilidad. Su trabajo revela la existencia de regiones genéticas recién descubiertas que están vinculadas con la delgadez.
Los investigadores afirman que sus hallazgos confirman la idea de que, para algunas personas, ser delgado tiene más que ver con heredar un conjunto de genes “afortunados” que con seguir una dieta o un estilo de vida perfectos. El estudio fue publicado en la revista científica PLOS Genetics.
En las últimas décadas, diversos investigadores han descubierto cientos de cambios genéticos que aumentan la posibilidad de que una persona tenga sobrepeso. Sin embargo, se ha puesto mucho menos el foco en estudiar los genes de las personas que son delgadas.
Para realizar esta investigación, los científicos en Reino Unido utilizaron muestras de ADN de mil 600 personas sanas y delgadas, que tenían un índice de masa corporal (IMC) inferior a 18. Compararon esas muestras con las de dos mil personas con obesidad severa y las de 10 mil 400 personas de peso normal.
También utilizaron y analizaron cuestionarios sobre estilo de vida para descartar, por ejemplo, la existencia de trastornos alimentarios. Los investigadores comprobaron que las personas que eran obesas tenían más probabilidades de tener un conjunto de genes relacionados con el sobrepeso.
En tanto, las personas que eran delgadas no solo tenían menos genes relacionados con la obesidad sino que también exhibían cambios en las regiones genéticas recientemente asociadas con la delgadez sana. El investigador principal, el profesor Sadaf Farooqi, de la Universidad de Cambridge, pidió a las personas que sean menos prejuiciosas sobre el peso de los demás.
Esta investigación muestra por primera vez que las personas delgadas y sanas generalmente son flacas porque tienen una carga menor de genes que aumentan las posibilidades de que tengan sobrepeso y no porque sean moralmente superiores, como sugieren algunas personas”, manifestó. “Es fácil apresurarse a juzgar y criticar a las personas por su peso, pero la ciencia muestra que las cosas son mucho más complejas”.