Esta mañana se informó que el avión presidencial TP-01 que fue enviado a California para recibir mantenimiento, no se ha vendido, no se ha recibido alguna propuesta seria y genera muchos gastos por lo que regresará a México para ser rentado o vendido en copropiedad.
Andrés Manuel López Obrador en la conferencia matutina desde Palacio Nacional explicó que el avión presidencial ha estado en Victorville, California, donde todavía recibe mantenimiento para obtener la certificación apropiada de vuelo.
En junio de 2019 había 42 potenciales compradores de 16 países y durante el proceso de selección se redujo a dos ofertas, pero no se concretaron. “Al final no consiguieron ellos financiamiento”, dijo AMLO.
Jorge Mendoza Sánchez, director general de Banobras, declaró que se relanzará el esfuerzo de venta y el gobierno de México decidió que el avión regrese a su territorio, donde será resguardado por la Fuerza Aérea.
Como parte de la estrategia para obtener recursos por este activo, se contemplan tres escenarios: Relanzar el esfuerzo para venderlo a un comprador único. Venta en copropiedad, posiblemente a una sociedad de 12 empresas. Renta del activo, posiblemente por hora.
El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que a través de cualquiera de estos esquema se lograría que los recursos regresen al pueblo, “porque entre más tiempo lo tenga el gobierno de México, hay que pagar mantenimiento”.
“Ya puede volar, pero según los técnicos de aviación hace falta terminar con todo el proceso de certificación, y regresa a México, al Hangar Presidencial, a Santa Lucía, y ahí va a estar mientras se vende o se lleva a cabo cualquiera de las acciones” detalló Obrador.
También le preguntaron al presidente si ofrecieron el avión al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y dijo que sí se negoció e incluso habrían aceptado pago en especie, con equipo médico, pero no se concretó ningún acuerdo.