La aplicación rusa FaceApp, que se caracteriza principalmente por dar a sus usuarios una idea de cómo lucirían sus rostros si fueran del sexo opuesto, ha vuelto a ponerse de moda. No es la primera vez que esta App irrumpe entre la población y consigue llenar todos los grupos de WhatsApp con sus imágenes alteradas. Se trata de un editor de fotos y vídeos que permite a los usuarios “editar retratos basados en tecnología de red neuronal que genera automáticamente transformaciones faciales altamente realistas”.
En 2019 la aplicación se popularizó por la posibilidad de visualizar cómo luciría un rostro siendo anciano, y en esta ocasión el cambio es de sexo: gracias a una reciente actualización que utiliza técnicas de deepfake, se puede transformar con bastante realismo el género de un rostro.
Sin embargo, como ya sucedió el pasado año, esta App está generando incertidumbre entre los expertos en ciberseguridad, ya que su política de privacidad es cuanto menos controvertida. No se trata, como se creía el año pasado, de un problema de ‘espionaje’ de las imágenes, en este sentido dicha política parece aclarar que ‘respeta’ la intimidad, sin embargo, se le da permiso para registrar importantes datos de los dispositivos, tales como el tipo y versión del sistema operativo, el fabricante y modelo, el ID de Google o Apple “para publicidad” -expresado así por la misma política-, el tipo de navegador, la resolución de pantalla y, los dos aspectos más alarmantes, la dirección IP -y el país de ubicación- y el sitio web que se ha visitado antes de visitar su sitio web.
Por otro lado, al aceptar la política de privacidad también se acepta que al conectar la aplicación con las cuentas de redes sociales, por ejemplo un perfil de Facebook, se otorga acceso a FaceApp para “recopilar información de esa plataforma o red”, como alias de redes sociales, nombre y apellido, número de ‘amigos’ y, dependiendo de la configuración en Facebook o la red social que se haya conectado, una lista de amigos -aunque, dicen, no utilizan ni almacenan esta información-.
Por último, son muy claros en cuanto a la venta de datos a terceros: advierten que recopilan datos de actividad online en su app y su web, “incluidas las páginas o pantallas que viste, cuánto tiempo pasaste en una página o pantalla, rutas de navegación entre páginas o pantallas, información sobre tu actividad en una página o pantalla y tiempos de acceso y duración del acceso” y que sus “proveedores de servicios y ciertos terceros (por ejemplo, redes de publicidad online y sus clientes) también pueden recopilar este tipo de información”.
Esta política es “efectiva” desde el 3 de diciembre de 2019 y “actualizada” por última vez el 4 de junio de 2020, de acuerdo a su propia web.