Amnistía Internacional México consideró que no es aceptable que la designación de la titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) se haya dado en esas condiciones. El organismo advirtió que la grave crisis de derechos humanos en México “sólo puede enfrentarse con un órgano autónomo, independiente y legítimo, que sea el contrapeso del Estado y defienda los derechos de todas las personas”.
No fue la única organización no gubernamental que cuestionó y lamento la designación de Rosario Piedra Ibarra como nueva titular de ese organismo y quien el martes -en medio de golpes, gritos y jaloneos- rindió protesta ante el el Senado de la República.
El colectivo Designaciones, que impulsan las organizaciones civiles Fundar y Artículo 19, señalaron que la Cámara de Senadores “sepultó la legalidad” con la designación de Piedra Ibarra al frente de la CNDH, “minando con ello la legitimidad e independencia de este organismo constitucional autónoma”.
En tanto, la Comisión Mexicana de Derechos Humanos A.C. calificó de una “imposición” la designación de la hija de la fundadora del Comité Eureka, Rosario Ibarra de Piedra, y exigió una Comisión Nacional de los Derechos Humanos “con verdadero enfoque en la defensa de los derechos humanos en México, sin intereses políticos e ideológicos”.
Víctor Caballero, del Colectivo Aequus, Promoción y Defensa de Derechos Humanos, manifestó que lo que quedó claro en esta designación de Piedra Ibarra al frente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos fue que ni a los senadores de Morena ni a los senadores del PAN “les interesan los derechos humanos”. Subrayó que, “como siempre, quedó de manifiesto que las instituciones creadas para atender a la sociedad están en manos de la clase política y sus intereses”.