Una pareja gana la batalla para nombrar a su hijo Lucifer, después de que el registro civil intentó impedirlo. El funcionario de la institución, horrorizado les dijo que su hijo de cuatro meses «no tendría éxito en la vida» con ese nombre.
Dan y Mandy Sheldon, los padres del pequeño, acudieron a la oficina del registro civil de Derbyshire, en Reino Unido, con la firme intención de registrar al bebé, luego de que las oficinas del consejo permanecieron cerradas por varios meses a causa de la emergencia sanitaria.
Dan, de 37 años, jefe de una compañía de alquiler de plantas, presentó una queja oficial sobre cómo él y Mandy, de 32 años, fueron tratados en la oficina local en Chesterfield, Derby.
Él dijo: “Estábamos muy emocionados de ir a registrar a nuestro hijo, pero la mujer nos miró con total disgusto».
«Ella nos dijo que nunca podría conseguir un trabajo, y que los maestros no querrían enseñarle». «Traté de explicar que no somos personas religiosas, y Lucifer en griego significa «portador de luz y mañana».
«Incluso nos dijo que era ilegal nombrar a un niño de esa forma, y que debíamos elegir otro nombre, pero preferimos referirnos a él como Lucifer».
Se les dijo a los padres que salieran de la habitación mientras el oficial verificaba si se le permitía registrar al niño con el nombre, de acuerdo a las autoridades, satánico.
Dan agregó: “Estábamos atónitos por su comportamiento». “Finalmente lo hicieron, pero a regañadientes».
“Honestamente, pensamos que era un buen nombre. . . único; no esperábamos tener complicaciones al respecto».
El Consejo del Condado de Derbyshire dijo: «Nos disculpamos si se sintieron ofendidos, pero es el trabajo de nuestros registradores asesorar en estos asuntos, ya que a veces las personas no son conscientes de ciertos significados o asociaciones en torno a ciertos nombres».
El nombre del diablo como Lucifer se vio por primera vez en la Biblia en 1611. En versiones más modernas de la Biblia se le conoce como Satanás.
El Reino Unido tiene muy pocas restricciones legales para los nombres, aunque los que contienen obscenidades y números probablemente sean rechazados.
Pero muchos países tienen reglas estrictas. Nueva Zelanda agregó a Lucifer a su lista de nombres prohibidos en 2013.