En México, el Servicio Meteorológico Nacional dio a conocer que el país registra la cuarta oleada de polvo del Sahara. De acuerdo con la dependencia perteneciente a la Conagua, las partículas llamadas “iberolitos” viajaron a través del océano Atlántico y actualmente se encuentran sobre la Península de Yucatán, por lo que se pide a los habitantes seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias, ya que el polvo puede provocar alergias, problemas en las vías respiratorias e irritación de la garganta.
Según investigadores del Observatorio Atmosférico del Estado esta nube de polvo es la menor de las cuatro oleadas que ha habido en lo que va de este 2023. El polvo del Sahara ocasiona una tonalidad naranja o roja al amanecer y al atardecer, los cuales se intensifican por la interacción de los rayos solares con las partículas de polvo. Cabe mencionar que las partículas no representan un peligro significativo para la población, pero podría afectar en las vías respiratorias.
Pero … ¿Qué es el polvo del Sahara?
Si no lo sabías, El Sahara es el desierto más grande del mundo y cada año desprende arena que viaja por el Océano Atlántico hasta llegar a otros continentes. Las partículas de polvo se mueven con las tormentas y ciclones del norte de África y llegan a América durante los meses de junio, julio y agosto. Al año, el viento transporta alrededor de 100 millones de toneladas de polvo al otro lado del Atlántico.
La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés) cuenta con diversas herramientas para estudiar la cantidad de polvo que viaja por la Tierra, la principal se localiza dentro del el Observatorio de la Tierra. Este departamento se encarga de realizar un registro en tiempo real de manera satelital sobre el movimiento de las grandes nubes de arena que viajan sobre el mar.
Los efectos que produce
Los especialistas aseguran que el fenómeno no es peligroso para los seres humanos, pero puede tener consecuencias significativas, ya que disminuye la buena calidad del aire y puede ocasionar complicaciones a personas que tengan problemas respiratorios como asma. De igual manera, las partículas pueden lastimar los ojos e irritar la piel. Algunas medidas para contrarrestar los efectos del polvo del Sahara son:
Usa cubrebocas y protección ocular si la calidad del aire es muy mala.
Evita exponerte a las altas concentraciones de polvo y si es posible mantente en interiores durante estos eventos.
Mantén cerradas todas las puertas y ventanas. También se puede humedecer el piso antes de limpiar para evitar que el polvo vuele hacia las vías respiratorias.