El Gobierno de Estados Unidos informó este jueves los cargos de narcotráfico, lavado de dinero y terrorismo presentados contra el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y otras 14 figuras del chavismo, así como contra dos disidentes de la antigua guerrilla de las FARC.
Los fiscales de Florida y Nueva York presentaron los cargos y aseguran que durante los últimos 20 años, desde que el difunto presidente Hugo Chávez asumiera el poder en 1999, el Ejecutivo venezolano ha estado conspirando con las FARC para ingresar en territorio estadounidense toneladas de cocaína.
El fiscal general de Estados Unidos, William Bar, aseguró que desde 1999 Maduro y otros altos cargos del chavismo, como Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), forman parte del “Cártel de los Soles”, cuyo nombre se refiere a las insignias que llevan en los uniformes los militares venezolanos de alto rango.
Según Barr, Maduro, como “líder” del Cártel de los Soles, y los otros funcionarios venezolanos han trabajado con los disidentes de las FARC para hacer llegar a Estados Unidos a través del Caribe y varios países de Centroamérica, incluido Honduras, unas 250 toneladas de cocaína por año.
“El anuncio de hoy busca erradicar la extensa corrupción dentro del Gobierno venezolano”, subrayó Barr. Se trata de la segunda vez en la historia de EEUU que se presentan cargos contra un jefe de Estado después de que, en 1989, fiscales de Miami acusaran de narcotráfico al dictador panameño Manuel Antonio Noriega, que fue detenido durante la invasión estadounidense, enjuiciado y encarcelado en Florida.
Para llevar a los acusados ante la Justicia, EEUU ofreció 15 millones de dólares por cualquier información que lleve al arresto de Maduro, 10 millones por Cabello y otros 10 millones por cualquier pista que lleve a la detención de una de estas tres figuras: el vicepresidente económico Tareck El Aissami; el exgeneral venezolano Hugo Carvajal, y el exjefe militar Cliver Alcalá Cordones.
Los acusados son los cinco mencionados anteriormente (Maduro, Cabello, El Aissami, Carbajal y Alcalá Cordones), así como el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino; el titular de Interior, Néstor Reverol; el juez Maikel Moreno del Tribunal Supremo; y el exviceministro de Energía de Venezuela Nervis Gerardo Villalobos Cárdenas.
También fueron inculpados el exministro de Energía Luis Motta; un antiguo militar de la fuera aérea Oscar Rafael Colmenarez Villalobos; el superintendente de Criptoactivos, Joselit Ramírez; el antiguo subdirector de la Oficina Nacional Antidrogas (ONA) y actual agregado militar en Alemania, Edylberto Jose Molina; así como Rafael Antonio Villasana Fernández y Vassyly Kotosky Villarroel, ambos exmiembros de la Guardia Nacional Bolivariana.