Mujeres japonesas presentaron una petición al gobierno protestando contra la estricta convención de usar zapatos de tacón alto en el trabajo. Con la campaña en redes sociales #KuToo, un juego de palabras de «kutsu» (zapato) y «kutsuu» (dolor), y una versión para la ocasión del eslogan feminista #MeToo, ideado por la actriz Yumi Ishikawa y ganó rápidamente el apoyo de 19 mil personas.
Y es que las féminas afirman que es casi imposible escapar a esos zapatos incómodos en el trabajo o incluso cuando se busca empleo. «Hoy, hemos presentado un manifiesto reclamando una ley que prohíba a los empresarios obligar a las mujeres a llevar tacones, que es discriminación sexual y constituye acoso», dijo Ishikawa a la prensa tras entrevistarse con funcionarios del ministerio de Trabajo.