Diversas organizaciones mayas de la Península de Yucatán exigieron la suspensión del «proyecto colonizador» Tren Maya, así como de otras obras que despojan a los pueblos originarios de sus tierras y amenazan sus territorios.
«Queremos mantener y enriquecer nuestra cultura y exigimos la suspensión del proyecto colonizador de un tren que nos desplaza y nos aplasta, exigimos la suspensión del modelo de turismo depredador que banaliza y mercantiliza nuestra dignidad indígena. Queremos seguir produciendo la milpa maya y exigimos la suspensión de los monocultivos que envenenan nuestra tierra», detallaron en un escrito, difundido este sábado por el Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible en la Península de Yucatán (CCMSS-PY).
Ahí los colectivos mayas reprochan la intervención gubernamental en los ejidos y poblaciones indígenas, para dividirlos y confrontarlos, en torno a megaproyectos que, consideran, son nocivos para las comunidades, los recursos naturales, su identidad y la propiedad de sus territorios, amenazando su unidad, autonomía y libre determinación.
«Queremos generar y distribuir nuestra propia energía eléctrica y exigimos la suspensión de los megaproyectos privados de energías que nos despojan de nuestro territorio. Queremos criar nuestros propios animales y exigimos la suspensión de las megagranjas de cerdos que contaminan nuestra agua», se lee en el pronunciamiento.
«La tierra es comunitaria, ni la vendemos ni la rentamos. No a la división que generan en nuestros pueblos los partidos políticos y las religiones. Sí a la cultura y a la lengua maya. Si a la defensa de nuestro derecho a la libre determinación», resaltan en el documento.
Esta semana se reunieron diversos colectivos y firmaron ese documento, en un evento que contó con la presencia de la Asamblea de Defensores del Territorio Maya «Múuch’ Xíinbal», por los Apicultores mayas de Dzonot afectados por las fumigaciones, en Tizimin, Yucatán; por el Centro Comunitario U kúuchil k ch’i’ibalo’on, del municipio Felipe Carrillo Puerto, en Quintana Roo y por el Colectivo de Comunidades Mayas de los Chenes, municipio Hopelchén, Campeche.
También, por el Colectivo de Semillas Much’ Kanan I’inaj y el Colectivo K-luumil x’ko’olelo’ob, municipio Bacalar, el Concejo Indígena U yóol lu’um, el Ejido Dziuche, y U Lool Che Sociedad cooperativa, del municipio José María Morelos, en Quintana Roo, además de USAEC Apicultores Sociedad Cooperativa, municipio Calakmul, Campeche y U Yich Lu’um, municipio Sanahcat, Yucatán, entre otros.