De que el pasado 27 de octubre, Elon Musk concretó la compra de Twitter por 44 mil millones de dólares, muchos usuarios amenazaron con abandonar esta red social ante la preocupación sobre el nivel de control o las libertades que se perderían bajo la nueva dirección a cargo del dueño de Tesla.
Por esta razón, en esta semana Mastodon ha registrado un ‘pico’ de usuarios en su plataforma. De acuerdo con Wired, entre el 20 y el 27 de octubre, se inscribieron cerca de 18 mil personas en esta red y, al 28 de octubre, se contabilizaban 381 mil 113 usuarios.
¿Qué es Mastodon?
La red social similar a Twitter, que se lanzó en 2016, tiene como objetivo ‘curar’ los males del pajarito azul a través de la magia de la descentralización.
De acuerdo con Fast Company, en lugar de operar como una red social, Mastodon se basa en una red de servidores de código abierto interconectados, llamados “instancias”, y los propietarios de cada instancia establecen sus propias políticas de moderación.
Algunas instancias incluso tienen enfoques específicos, como juegos, tecnología o arte.
Aunque Mastodon suena como una buena alternativa, una combinación del feed cronológico de Twitter con los espacios impulsados por la comunidad de Reddit, sin anuncios ni intereses corporativos, la promesa se desmorona una vez que realmente se usa.
¿Qué se puede publicar en Mastodon?
Mastodon admite publicaciones de audio, video e imágenes, descripciones de accesibilidad, encuestas, advertencias de contenido, avatares animados, emojis personalizados, control de recorte de miniaturas y más, para ayudarlo a expresarse en línea.
El magnate Elon Musk dio sus primeros pasos en esta nueva etapa en la red con dos movimientos más o menos esperados: el despido de su cúpula directiva y su salida de la Bolsa de Nueva York, además de una nueva política de moderación de contenidos.
Cuando Musk tuiteó que “el pájaro ha sido liberado”, casi de inmediato le respondió la Comisión Europea: el comisario de Mercado Interior, Thierry Breton, le recordó que “en Europa, el pájaro volará según nuestras normas de la UE”, indicó Breton en respuesta al mensaje de Musk.
En concreto, Breton hizo referencia a la nueva ley comunitaria de servicios digitales, que regulará el contenido que se publica en internet y obligará a las grandes plataformas como Twitter, Google, Apple o Amazon a eliminar con rapidez la información ilegal, una vez tengan conocimiento de ella.
Además, impondrá que estas empresas sean más transparentes en el funcionamiento de los algoritmos que determinan lo que cada usuario ve en la red, en función de su perfil.
Desde el principio, Musk había dejado clara su intención de convertir a Twitter en una empresa no bursátil, privada, que a diferencia de las cotizadas tienen menores obligaciones de facilitar información sobre sus movimientos y su desempeño y son objeto de menor escrutinio por parte de los reguladores.