Este verano se esperan dos lluvias de meteoros importantes: Las Delta Acuáridas, con pico el 30 de julio, y las populares Perseidas, con un punto máximo para su observación cercano al 12 de agosto.
Debido a que el momento de máxima actividad de las Delta Acuáridas será dos días después de la luna llena (el plenilunio será el 27 de julio), este será un mal año para su observación, sin embargo pasará todo lo contrario con las Perseidas, ya que sucederán cuando la Luna esté en su fase menguante.
Con respecto a las Delta Acuáridas, a pesar de que su mejor periodo de observación será el 30 de julio, el periodo total en el que se encontrarán en actividad va desde el 12 de julio hasta el 23 de agosto, por lo que sí será posible apreciarlas, sobre todo en los horarios cercanos al amanecer.
Los Delta Aquuariids son una lluvia de meteoros que se originó por la ruptura de los cometas Marsden y Kracht Sungrazing, y reciben su nombre porque su radiante está ubicado en la constelación de Acuario, cerca de una de sus estrellas más brillantes, la Delta Aquarii.
La otra lluvia de estrellas importante durante el verano será la conocida como «Perseidas», fenómeno que se prolongará alrededor de un mes, iniciando su actividad desde el 17 de julio y hasta el 24 de agosto.
Para el ojo humano, este fenómeno se materializará como luces fugaces que atraviesan el cielo y se pueden observar a partir de media noche. Estos destellos serán generados por pequeños meteoroides (partículas que no miden mas que un grano de arena), que entran a la atmósfera a más de 210 mil kilómetros por hora, lo que equivaldría a recorrer la Península Ibérica de norte a sur en menos de 20 segundos.
Este 2020, las Perseidas podrán ser vistas desde el 17 de julio hasta el 24 de agosto en todo el hemisferio norte. Sin embargo, la noche que alcanzará la mayor actividad será en la noche del 12 al 13 de agosto.