De la mano de la nueva normalidad llegó una serie de cambios a los hábitos diarios; medidas como la sana distancia, el lavado de manos constante, el uso de cubrebocas y la omisión de saludos de beso y de mano son algunas de la nuevas costumbres de prevención que se han hecho comunes alrededor del mundo. Sin embargo, una de las medidas causó el riesgo de muerte por colapso de pulmones a un joven de 26 años: correr con cubrebocas.
Zhang Ping, un joven de Wuhan solía correr con el cubrebocas puesto; después de la cuarentena, decidió salir a hacer ejercicio para reforzar sus defensas y tener buena salud. Inicialmente trotaba tres kilómetros diarios con el cubrebocas puesto, y poco después decidió aumentar la distancia y el nivel de exigencia. En uno de sus recorridos, comenzó a sentir un dolor en el pecho que le dificultaba la respiración, por lo que fue llevado por su familia al hospital.
Posterior a la revisión médica, su diagnóstico fue de neumotórax, es decir, una perforación en el pulmón que hace que el aire escape hacia la cavidad torácica; su pulmón se había comprimido en un 90%. El director del departamento de cirugía torácica del hospital de Wuhan, Chen Baojun, informó que la delgadez del corredor podría haber contribuido con esta complicación en la salud, y recomendó a los deportistas no realizar actividades físicas con cubrebocas.
“Este trastorno suele ocurrir en personas con asma, fibrosis quísticas y neumonía, aunque también puede representar un peligro para las personas sanas: los hombres altos y delgados de entre 20 y 40 años, están en la zona de riesgo”, declaró Chen Baojun.