Los incendios que afectan el norte de California se convirtieron en su conjunto en el segundo más grande jamás registrado en el estado tras devastar unas 400 mil hectáreas. Más de 13 mil bomberos trabajan en la extinción del fuego, repartido en más de una veintena de frentes.
La autoridades señalan que el fuego afecta actualmente a cinco condados: Napa, Sonoma, Lake, Yolo y Stanislaus, y se encuentra controlado apenas al 15%, según las autoridades. “Es ya el segundo mayor incendio forestal de la historia del estado“, explicó el comandante del Departamento de Bosques y Protección contra Incendios de California (Calfire), Sean Kavanaugh, en declaraciones recogidas por la cadena NBC.
Hasta ahora el fuego se ha cobrado cuatro vidas y ha destruido 560 estructuras y causado daños a otras 125. El incendio se debe en gran parte a la caída de rayos y a la grave ola de calor que afecta a la región.
“En 1987, en todo el año, hubo unos 11 mil incendios por impactos de rayo. Hasta ahora llevamos más de 12 mil en lo que va de año”, ha explicado un portavoz de Calfire, Jeremy Rahn. Más de un centenar se registraron solo el pasado viernes.
En respuesta, se ha activado la Guardia Nacional para dar apoyo con helicópteros y una docena de retenes de 20 personas, indicó Rahn. También se han solicitado recursos a otros estados.
Las autoridades han emitido este fin de semana nuevas órdenes de evacuación para la población del condado de Sonoma, al norte de San Francisco, que se suman a las decenas de miles de personas que ya han tenido que ser evacuadas por el avance del fuego en el estado estadounidense. En total unas 115 mil personas han sido evacuadas.
El gobernador de California declaró el pasado martes 18 de agosto emergencia en todo el territorio a causa de los incendios, cuando también se registró una ola de calor extrema con temperaturas por encima de los 50 grados centígrados.