En los primeros cinco días de marzo, se registraron en Tabasco por lo menos 16 ejecuciones, la mayoría en la región de la Chontalpa y en el municipio de Centro, donde se ubica su capital. La mayoría de estos crímenes han sido atribuidos a la disputa entre bandas dedicadas al robo y venta de combustible, así como al narcomenudeo.
El combate a la inseguridad, que tocó sus índices más altos en el sexenio de Arturo Núñez Jiménez, fue una promesa de campaña del actual gobernador Adán Augusto López Hernández, quien afirmó que dará resultados en la materia en los primeros seis meses de su administración.
“Yo creo que se están dando buenos resultados, a lo mejor la gente no lo siente. Nosotros preferimos la efectividad a la espectacularidad. Hablé con ellos (sus funcionaros) y les dije que son seis meses para ver si son efectivos” expresó el mandatario este lunes en entrevista radiofónica.
Pero de acuerdo a los datos arrojados por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, durante el mes de enero -el último del que se tiene un registro oficial en 2019- se cometieron 35 homicidios dolosos en el estado, 23 con arma de fuego, siendo el peor inicio de año del último lustro. Sin embargo, durante todo el primer bimestre y ahora en marzo, se han presentado múltiples asesinatos.
“El 80 por ciento de las ejecuciones en toda la Chontalpa es por el huachicoleo, son delitos del orden federal que generan violencia en el fuero común. Están compitiendo por el territorio” expresó al respecto el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Jorge Alberto Aguirre Carbajal. El mismo secretario de seguridad que en el gobierno de Arturo Núñez.
Este martes, fue hallado el cuerpo de un hombre en la ranchería Anacleto Canabal, en el municipio de Centro, este tenía la cabeza envuelta con cinta y varios impactos de bala. Durante la mañana, un hombre fue apuñalado en Ingenio Azucarero en Tenosique. Horas más tarde, dos hombres más fueron ejecutados en la colonia Gaviotas, también en el municipio de Centro. Estos fueron asesinados por sicarios que dispararon en su contra. Finalmente, por la tarde, un motociclista fue baleado en la misma demarcación.
Estos hechos se suman a otros que se reportaron el fin de semana, siendo el más relevante el asesinato de cuatro miembros de una familia, entre ellos un menor de dos años, que circulaba a bordo de su vehículo en Huimanguillo. Sus ejecutores los mataron a balazos y después le prendieron fuego al vehículo. Sólo una niña de 11 años sobrevivió al ataque. Nota del Financiero.