El famoso hombre de negocios Jamie Dimon, director ejecutivo de JPMorgan, estimó que es probable que los vientos en contra “serios” empujen a Estados Unidos y al resto del mundo a una recesión a mediados del próximo año. Los retos que afronta la economía estadounidense
Jamie Dimon, director ejecutivo del JP Morgan Chase, el mayor banco de Estados Unidos advirtió a los inversores que deben estar preparados para «un huracán» que se avecina por la presión de la agresiva política monetaria en su país y la guerra de Ucrania.
James Dimon multimillonario norteamericano desde el año 2005 ejerce el cargo de presidente y director ejecutivo de JPMorgan Chase, el más grande de los cuatro grandes bancos Estadounidenses. Anteriormente estuvo en la junta directiva del Banco de la Reserva Federal de Nueva York.
“Estas son cosas muy, muy serias que creo que probablemente empujarán a Estados Unidos y al mundo; quiero decir, Europa ya está en recesión, y es probable que EU caiga también en algún tipo de recesión en los próximos seis a nueve meses. a partir de ahora”, dijo Dimon en una entrevista con CNBC.
Si bien Estados Unidos está funcionando bien en este momento, una serie de indicadores y problemas globales como el impacto del aumento de la inflación, las tasas de interés subiendo más de lo esperado, los efectos de la flexibilización cuantitativa de la Reserva Federal (Fed) y la guerra de Rusia en Ucrania, están haciendo sonar las alarmas, dijo Dimon.
¿Pánico en mercados crediticios?
“El lugar donde probablemente veremos más grietas y tal vez un poco más de pánico es en los mercados crediticios, y podría ser ETF, podría ser un país, podría ser algo inesperado, le dijo Dimon a CNBC.
“Si hacemos una lista de todas las crisis anteriores, sentados aquí no habríamos predicho de dónde vinieron, aunque creo que esta vez podríamos predecir que probablemente sucederá. Entonces, sería muy cauteloso”.
Dimon señaló que el S&P 500 “podría tener mucho camino por recorrer” en su declive, y que “podría ser otro 20 por ciento fácil”. El índice ha bajado casi un 25 por ciento este año. “El próximo 20 por ciento será mucho más doloroso que el primero”, dijo a CNBC.
“Las tasas que suben otros 100 puntos básicos resultan mucho más dolorosas que los primeros 100 porque la gente no está acostumbrada”, agregó.