La búsqueda de tesoros antiguos es un auténtico deporte nacional para la gente en Reino Unido. Algunos pasan horas vagando por praderas y campos con sus detectores de metal en busca de monedas o armas de otra época. Sin embargo, durante el primer encierro de marzo a mayo, quedó prohibido hacer este tipo de exploraciones. Durante el actual confinamiento británico también hay estrictas normas para la búsqueda de tesoros.
Así que, por ahora, los «cazadores de tesoros» han puesto manos a la obra en sus propios jardines y casas. Y han tenido un éxito sorprendente, tanto que el Museo Británico dice que se han registrado 47.000 hallazgos en el último año.
Entre los descubrimientos, hay algunos realmente asombrosos, como un tesoro de los Tudor, la importante familia de la nobleza del siglo XVI. Estas preciosas monedas de oro y plata del período de los Tudor fueron descubiertas entre la maleza.
Se trata de 63 monedas de oro y una de plata, que datan de finales del siglo XV y principios del XVI. Un jardinero en New Forest, en el sur de Inglaterra, descubrió el tesoro por casualidad mientras quitaba la maleza.
El tesoro de los Tudor también incluye cuatro valiosas monedas del reinado de Enrique VIII, que en elgunos casos llevan las iniciales de sus esposas, Catalina de Aragón, Ana Bolena y Juana Seymour.
El Museo Británico dice que aún se desconoce cómo el tesoro, que ya era de un alto valor en ese entonces, llegó hasta ese jardín. Tampoco está claro cómo 50 monedas de oro puro (Krugerrand sudafricano), acuñadas durante el régimen del apartheid, llegaron a ser enterradas en un jardín en Milton Keynes, al noroeste de Londres.
También es curioso un conjunto de sellos de aleación de plomo medieval encontrado en Dursley, Gloucestershire. El sello muestra a un obispo en toga, sosteniendo un báculo en su mano izquierda. La inscripción en latín lo identifica como David, obispo de St. Andrews.
Sin embargo, el hallazgo es aparentemente una imitación que probablemente fue usada para autentificar documentos falsificados. Los sellos genuinos y de alta calidad no estaban hechos de plomo sino de una aleación de cobre, o incluso de plata. Así que es posible que alguien haya querido deshacerse del sello falso lo antes posible.
Los rastreadores de tesoros en Old Basing, Hampshire, mientras tanto, han encontrado un mueble romano hecho de aleación de cobre. Está datado en torno al año 200 (era común) y está decorado con el rostro perfectamente conservado del antiguo dios griego Oceanus. El hallazgo es único, ya que no se ha encontrado ningún rastro marítimo en ningún cofre, puerta u objeto casero de dicho período.
Todos los hallazgos deben ser reportados
La búsqueda de tesoros es muy popular en el Reino Unido que incluso es el escenario de una aclamada serie de televisión llamada «Detectores».
Pero hay reglas muy claras en el Reino Unido sobre lo que cuenta como «tesoro» y lo que los cazadores de tesoros tienen que hacer con sus hallazgos. Por ley, están obligados a informar de ellos a las autoridades locales. Luego se realiza el correspondiente procedimiento de preservación arqueológica para asegurarse de que se registre cualquier contexto histórico en el lugar del descubrimiento.
Un comité de evaluación decide qué pasará con el tesoro encontrado
El Comité de Evaluación de Tesoros (TVC, por siglas en inglés) determina entonces el valor del objeto y quién tiene derecho a una parte del hallazgo y por cuánto. En cualquier caso, los museos siempre tienen prioridad sobre los objetos. Solo en 2019, el Museo Británico registró 81.602 hallazgos públicos, 10.000 más que en 2018.
Todos los hallazgos son puestos a disposición del público por el Museo Británico en su Plan de Antigüedades Portátiles (PAS), una base de datos en línea. Esta incluye información de libre acceso sobre más de 1,5 millones de objetos.
A veces los pequeños hallazgos arqueológicos han conducido a otros mucho más grandes, o incluso a sitios arqueológicos enteros. Ese fue el caso de un asentamiento de la Edad de Hierro, y un asentamiento romano desperdigado, y un cementerio anglosajón en Lincolnshire.
Por lo tanto, todos los hallazgos arqueológicos deben ser reportados. Los expertos tienen que poder evaluar cada uno de ellos, determinar su contexto histórico y evaluar si es arqueológicamente relevante. Fuente DW.