El aumento de temperaturas, los precarios servicios de agua, las lluvias e inundaciones agudizadas por «El Niño» han desatado una ola de dengue en Perú, el peor brote de esta enfermedad de su historia más reciente.
En los primeros cuatro meses y medio de 2023, los casos confirmados y probables de dengue en Perú superan las cifras registradas en todo 2017, que hasta la fecha era considerado el año más devastador, al menos en el siglo XXI, de esta enfermedad endémica causada por la picadura de un mosquito infectado.
Hasta la fecha, las autoridades sanitarias peruanas reportaron 79 muertes y más de 72.000 casos de dengue, la mitad de ellos confirmados y la otra mitad «probables».
Estos últimos, según detalló a EFE el director del Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades (CDC) del Ministerio de Salud (Minsa), César Munayco, son pacientes sintomáticos o pertenecientes a áreas endémicas de dengue, cuyo diagnóstico no ha sido ratificado por una prueba.
79 muertes y más de 72.000 casos de dengue registrados
El número real, por tanto, podría ser menor (o mayor), aunque el doctor sostiene que la mayoría de casos «probables» pasan después a confirmarse.
En todo caso, la cifra total que maneja el Minsa es la mayor registrada en este siglo. Además, es casi cinco veces más alta que la de 2019 (15.287) y multiplica por quince los casos reportados en 2018 (4.698).
La tasa de letalidad, sin embargo, todavía se mantiene «baja» (0,11 %), «un poco menor» a la de 2017, según precisó Munayco.