El embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau recriminó en una reunión al Secretario de Seguridad Alfonso Durazo, pues consideró que la estrategia del Estado Mexicano para disminuir los delitos no está funcionando: “Que hayan operaciones y no solamente que hayan palabras porque esto no puede seguir así”, recalcó el embajador.
Es urgente contar con esquemas de cooperación y desarrollar acciones que den resultados concretos contra el tráfico de armas, “los niveles de inseguridad en ambos países no pueden seguir así, como sociedades no podemos aceptar lo que está pasando, estamos aquí para dar resultados”, afirmó el embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau.
Al participar en la ceremonia de inicio de una reunión binacional de planeación y seguridad fronteriza, el diplomático señaló ante funcionarios de ambos países y que forman parte de instituciones encargadas de combatir el tráfico de armas, mercancías y drogas, sostuvo que “la seguridad es un desafío y una responsabilidad compartida, sin ella difícilmente puede haber crecimiento y prosperidad”.
“Más aún cuando nuestras economías se encuentran tan enlazadas y México es nuestro principal socio comercial y uno de los puntos clave en los que debemos concentrarnos es en la seguridad y el combate al tráfico de armas, municiones y efectivo”.
“Necesitamos trabajar de manera más estrecha para tener éxito, ya que encuentro poco productivo que nos señalemos de quién es la culpa por las drogas que van al norte o por las armas y el dinero que van al sur, porque por muchos años los grupos criminales han aprovechado nuestros desacuerdos al respecto”.
Durante la ceremonia, el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Alfonso Durazo Montaño, expuso que lo primordial es tener una visión conjunta de trabajo sobre la problemática que genera la alta disponibilidad de armamento, ya que ello es el principio de lo que denominó “el círculo vicioso de la inseguridad”, ya que la posesión de armas facilita la comisión de delitos tanto en el ámbito de la seguridad pública como en cuestiones de narcotráfico.
Coincidió en que es necesario “dejar de echarse la bolita” y que las autoridades de ambas naciones trabajen de manera coordinada para ser más eficaces en el combate al tráfico de armas, y puso como ejemplo que los grupos delictivos que operan en México, como ocurrió en los hechos de violencia registrados en octubre pasado en Culiacán, los delincuentes utilizaron armamento de uso de las fuerzas armadas estadounidenses, y en la ejecución de nueve personas en Bavispe, Sonora, también se emplearon armas de origen estadounidense.
Durazo Montaño refirió que en el 70 por ciento de los casos que involucran un arma está el contrabando proveniente de Estados Unidos, por lo que aseguró que no se trata de echarse la bolita sino de conjuntar responsabilidades y sumar esfuerzos lo que llevará a tener mayores éxitos en combatir este delito.