Elon Musk es la persona más rica del mundo, con una fortuna de 199,66 mil millones de euros. A lo largo de su carrera profesional, este sudafricano ha fundado varias empresas y también ha estado al borde de la bancarrota. Sin embargo, ha conseguido erigir una fortuna a base de ideas buenas e inversiones arriesgadas.
Elon Musk dijo el martes 20 de diciembre que planea continuar como director general de Twitter hasta que pueda encontrar a alguien que esté dispuesto a reemplazarlo en el cargo. El anuncio de Musk se produjo después de que millones de usuarios de Twitter le pidieron al empresario que dejara la dirección de la plataforma en una encuesta sin fundamento científico que él mismo creó y de la que prometió apegarse a los resultados.
“Renunciaré como director general tan pronto como encuentre a alguien lo suficientemente ingenuo para aceptar el trabajo”, tuiteó. “Después de eso, sólo dirigiré los equipos de software y servidores”.
I will resign as CEO as soon as I find someone foolish enough to take the job! After that, I will just run the software & servers teams.
— Elon Musk (@elonmusk) December 21, 2022
Desde que tomó las riendas de la compañía con sede en San Francisco a finales de octubre, la gestión de Musk ha quedado marcada por reglas y políticas implementadas al vapor que a menudo han tenido que cambiarse o eliminarse al poco tiempo de haberse hecho públicas. También ha alejado a algunos inversionistas de su compañía de vehículos eléctricos, Tesla, a quienes les preocupa que Twitter le esté robando demasiada atención.
Algunas de sus acciones han inquietado a los anunciantes en Twitter y han desalentado a sus usuarios. Entre ellas se incluye el despido de la mitad de los empleados de la red social, entre los que se incluye a moderadores de contenidos, y desintegrar un consejo de asesores de confianza y seguridad que la compañía formó en 2016 para enfrentar el discurso de odio, la explotación infantil, el suicidio y otros problemas en la plataforma.
Musk, quien también dirige la compañía de cohetes espaciales SpaceX, ha reconocido anteriormente lo difícil que será encontrar a alguien que asuma las riendas de Twitter. Mientras bromeaba con tuiteros el domingo, dijo que a la persona que lo remplace “le debe gustar mucho el dolor” para dirigir a una compañía que ha dicho que ha estado en “el carril de alta velocidad rumbo a la bancarrota”.
“Nadie quiere el trabajo que pueda mantener a Twitter con vida. No hay un sucesor”, tuiteó Musk. Tal y como están las cosas, Musk seguiría teniendo una influencia abrumadora sobre la plataforma como su propietario. Despidió al consejo de administración de la empresa poco después de tomar el control.