La pintura rupestre de un gran jabalí y tres figuras humanas a su alrededor sería la obra de arte más antigua del mundo, de unos 51.200 años, y hallada en la cueva indonesia de Sulawesi, según un equipo de científicos.
El hallazgo arqueológico lo anunció un grupo de científicos que ya había descubierto en 2019 una escena de caza en otra cueva cercana que entonces se estimó en 44.000 años de antigüedad.
Esta nueva pintura, hecha con pigmentos de color rojo, «es la evidencia más antigua de una narración», aseguró a AFP Maxime Aubert, arqueólogo de la universidad australiana Griffith.
«Es la primera vez que sobrepasamos la barrera de los 50.000 años», añadió Aubert, coautor de un estudio publicado este miércoles en la revista científica Nature. «Nuestro descubrimiento sugiere que contar historias fue una parte mucho más antigua de la historia humana… de lo que se pensaba anteriormente», dijo otro de los autores, el arqueólogo Adam Brumm, en una conferencia de prensa.
El método láser
Para datar el descubrimiento los investigadores utilizaron un nuevo método que emplea láseres y software informático.
Se trata de una técnica de ablación con láser más precisa, más fácil, más rápida, más económica y requiere muestras de roca mucho más pequeñas que el método de series de uranio anterior, según dijo Aubert.
El equipo probó primero la nueva técnica en la cueva precedente. El sistema determinó que la escena de caza tenía al menos 48.000 años de antigüedad, 4.000 años más antigua de lo que el método de series de uranio determinó en 2019.
El equipo aplicó luego este método láser sobre una pintura sin datar en otra cueva en la isla de Sulawesi, Indonesia, descubierta en 2017. Se determinó que tenía al menos 51.200 años de antigüedad, superando el récord anterior.
«Probablemente sea solo cuestión de tiempo antes de que encontremos muestras que sean más antiguas», añadió Aubert.
Con información de Efe, Afp y DW