La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) condenó el asesinato de la periodista Norma Sarabia, corresponsal del periódico Tabasco Hoy en Huimanguillo, Tabasco y quien fue atacada cuando se encontraba afuera de su domicilio.
El organismo defensor de los derechos humanos en México recordó que con este homicidio suman ya 149 los periodistas asesinados desde el año 2000 (16 eran mujeres) e informó que ocho periodistas han sido asesinados en el transcurso del 2019, cifras terribles que demuestran la crítica situación que México enfrenta en materia de libertad de expresión y la urgente necesidad de brindar condiciones óptimas para que periodistas y medios de comunicación puedan realizar sus labores con seguridad..
La CNDH advierte que tuvo conocimiento de los hechos ocurridos la noche del martes cuando hombres armados asesinaron a la periodista Norma Sarabia, corresponsal del periódico Tabasco Hoy en Huimanguillo, quienes la atacaron cuando se encontraba afuera de su domicilio. De inmediato, personal de la CNDH se trasladó a Huimanguillo para ofrecer la atención y asesoría correspondiente a los familiares de la víctima, y se reunirá con autoridades de esa entidad con el fin de conocer el avance de las investigaciones y allegarse de la información correspondiente.
Además solicitó a la Secretaría de Gobierno y a la Fiscalía General de Justicia de Tabasco implementar medidas cautelares para salvaguardar la vida y seguridad de los familiares de la periodista Norma Sarabia, así como de los directivos y colaboradores del periódico Tabasco Hoy.
Los ataques contra periodistas dañan no solamente a las víctimas y sus familiares, sino que constituyen una afrenta a nuestro sistema democrático en su conjunto, aprovechándose de las debilidades y carencias institucionales en materia de seguridad y procuración de justicia, y provocando espacios y zonas de silencio en el país, donde quienes ejercen el periodismo ya no escriben sobre determinados temas por el temor de ser amenazados, desaparecidos o asesinados. México es el país más peligroso de América Latina para ejercer el periodismo.