El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, sentenció que su país no perdonará a los autores de los ataques contra el aeropuerto de Kabul, a quienes perseguirá y les hará pagar por los atentados. Visiblemente afectado, Biden dio un discurso a la nación, después de que doce soldados estadounidenses murieran y otros quince resultaran heridos, en los ataques contra el aeropuerto de Kabul, que el Estado Islámico «de Jorasán» ISIS-K reivindicó.
Biden calificó como “héroes” a los doce soldados estadounidenses que murieron en el atentado contra el aeropuerto de Kabul mientras ayudaban en las labores de evacuación. Reveló que ha pedido a los jefes de las Fuerzas Armadas que elaboren diferentes planes para atacar a ISIS-K en represalia por el atentado en Kabul. Dijo que quiere tener esos planes preparados para usarlos en el momento que considere necesario.
El presidente Joe Biden continuará con la evacuación acelerada de estadounidenses y demás personas de Afganistán después de los atentados en los que murieron doce soldados y acabaron con cualquier esperanza de concluir un conflicto armado de 20 años sin que se derramara más sangre. Alrededor de mil estadounidenses y muchos más afganos aún intentan salir de Kabul.
“Si podemos averiguar quién está relacionado con esto, iremos tras de ellos”, dijo el general Frank McKenzie, quien supervisa la evacuación, después de los ataques. Añadió que sería un error que Estados Unidos suspendiera prematuramente la evacuación a pesar de los riesgos.
El gobierno ha sido señalado por el caótico y letal proceso de evacuación que comenzó de manera formal únicamente después de que el Talibán completara la toma de Afganistán. Hasta el momento se ha evacuado a más de 100 mil personas.
Los atentados del jueves 26 de agosto sin duda intensificarán la presión política sobre Biden, quien ya enfrentaba duras críticas por no iniciar antes con las evacuaciones. El mandatario había anunciado en abril pasado que concluiría la participación de Estados Unidos en la guerra y retiraría a todas las tropas para septiembre.
En el Pentágono, el general McKenzie señaló que las fuerzas armadas creen que los ataques ocurridos en el perímetro del aeropuerto fueron perpetrados por combatientes afiliados al grupo Estado Islámico en Afganistán. Añadió que anticipan que se intenten más atentados.
Después del atentado suicida en la Puerta Abbey del aeropuerto, varios hombres armados del grupo conocido también por las siglas ISIS-K abrieron fuego en contra de civiles y militares. También se produjo un ataque en el Hotel Baron, que se encuentra a poca distancia del aeropuerto.
Los ataques no harán que Estados Unidos concluya sus operaciones antes de lo programado, recalcó McKenzie.
“Permítanme ser claros, si bien nos entristece la pérdida de vidas, tanto de estadounidenses como de afganos, seguiremos ejecutando la misión”, declaró. Añadió que en el aeropuerto había alrededor de 5 mil evacuados el jueves a la espera de abordar vuelos. Dijo que ha sido “útil trabajar con” el Talibán y no son sospechosos de los atentados. Con información de AP y EFE.