Como si fuera una de las siete plagas bíblicas, una nueva amenaza para el equilibrio ambiental en Estados Unidos; ahora, los apicultores estadounidenses reportaron la muerte de sus abejas por una especie de avispón gigante. Este avispón mide 5 centímetros de largo y tiene una envergadura alar de hasta 7.5 centímetros, su picadura causa un insoportable dolor y suele ser comparada con la mordedura de serpiente, más de una picadura podría causar la muerte a una persona; de hecho, en Japón estos insectos matan hasta 50 personas al año.
Aún se desconoce cómo es que estos avispones, procedentes de Asia, llegaron a Washington; se especula que pudieron haber sido transportados dentro de contenedores de carga, aunque no se descarta que hayan sido liberadas intencionalmente.
Estos avispones decapitan abejas y les arrancan el tórax para alimentar a sus crías, por lo que pueden acabar con colmenas completas en cuestión de horas; además, poseen un aguijón tan fuerte que es capaz de perforar los trajes de apicultura.
Actualmente los científicos se encuentran trabajando a marchas forzadas para encontrar a los avispones, preocupados porque puedan diezmar a la comunidad de abejas en Estados Unidos, al grado de extinguirlas. Chris Looney, entomólogo del Departamento de Agricultura del Estado de Washington dijo que, si no se logra detener a los avispones gigantes en los próximos años, probablemente no se logre detener la tragedia ecológica que representa perder a las abejas”.
La Vespa Mandarinia -nombre de esta especie- es un depredador furtivo; caza insectos de mediano a gran tamaño, como abejas, otras especies de avispas y mantis, estas avispas atacan, a menudo, colmenas para obtener las larvas de abeja de la miel como alimento para sus propias larvas.
El poderoso aguijón de la avispa gigante asiática mide un centímetro e inyecta un veneno especialmente potente que puede dañar los tejidos quienes has sido víctimas de la picadura lo describen como «un clavo caliente que entra en la piel”. Un humano alérgico picado por avispas gigantes puede morir a causa de una reacción alérgica al veneno que contiene una neurotoxina llamada mandaratoxin que puede ser letal, incluso en personas que no son alérgicas, si la dosis es suficiente, es decir, si se es atacado por más de un avispón gigante.