Las autoridades de salud en México externaron su preocupación sobre la automedicación y los medicamentos que no se deben de tomar para tratar Covid-19 por sus efectos adversos. «Tenemos el mensaje de evitar la automedicación. Es un riesgo para la salud de la persona en primera instancia por varias razones. Todos los medicamentos pueden generar reacciones secundarias o adversas.»
«Si tomamos un medicamento, este tiene una razón de ser y una indicación precisa para el cual el profesional de la salud lo indica. Si nosotros tomamos medicamentos de forma indiscriminada perdemos evaluación de riesgo de cada uno de los individuos.»
Los diferentes medicamentos que se han estado promoviendo como una solución para evitar contagios, o para tratar a pacientes enfermos desde casa, tienen efectos adversos a la salud; por ejemplo, la hidroxicloroquina incrementa los riesgos de ciertas complicaciones específicamente en el corazón; hace que lata muy rápido, generando arritmias. Se incrementa el riesgo de muerte de personas que toman estos medicamentos.
La ivermectina puede causar dolores de cabeza o problemas en la piel que requieren supervisión directa de un médico.
La azitromicina puede complicar algunas situaciones, y bajo ninguna circunstancia debe ser ingerida por pacientes ambulatorios. Bajo dosis y esquemas muy específicos puede coadyuvar a la recuperación de pacientes especializados, sin embargo en pacientes ambulatorios no está recomendada, así como tampoco se recomienda la dexametasona ni los anticoagulantes, los cuales pueden llegar a ser altamente peligrosos en caso de no haber sido recetados por un profesional de la salud.
Con respecto a las cifras de contagios, se informó que al 15 de julio de 2020 hay 317 mil 635 casos confirmados, 28 mil 361 activos y 81 mil 411 sospechosos. Se han registrado 369 mil 411 negativos, 36 mil 906 defunciones confirmadas y 199 mil 129 personas recuperadas.
A nivel nacional, 55% de camas de hospitalización general están disponibles y 45% ocupadas. En camas con ventiladores, 61% están disponibles y 39% ocupadas.
De las 30,257 camas de hospitalización general en el país, 13,745 están ocupadas y 16,512 están disponibles. Los estados que tienen menor capacidad son: Tabasco, Nuevo León y Nayarit. Por el contrario, las entidades con más camas de atención son: Querétaro, Zacatecas y Chihuahua.
En camas con ventiladores, que atienden a pacientes graves de Covid-19, 5 mil 995 están disponibles y 3 mil 806 están ocupadas. Los estados con más del 80% de espacios libres son: Chihuahua y Morelos.