Solo 17 centésimas de punto le impidieron a la gimnasta mexicana Alexa Morena el no subir al podio en Tokio 2020 y aún así logró lo que nadie en la historia de su país ha logrado. De hecho, rompiendo paradigmas obtuvo lo que ni siquiera se imaginaban muchos que algo así fuera posible.
En una disciplina que por décadas ha sido dominada por gimnastas del Estados Unidos y Europa del Este, en estos Juegos Olímpicos se rompió esa hegemonía en el salto de caballo, siendo la brasileña Rebeca Andrade la ganadora absoluta de la medalla de oro y la mexicana Alexa Moreno que muchos por su trabajo la veían en el podio, y que sin duda se lo merecía, desafortunadamente por un cuestionado conteo de los jueces se lo impidió.
Ya eres la más grande de la historia, ya abriste caminos! Eres grande Alexa! Estamos orgullosos de ti! #Mex #MexicoConAlexa pic.twitter.com/g2YSpfNPBP
— Alexa Moreno (@alexa_moreno_mx) August 1, 2021
Aun así la gimnasta mexicana rompió su propio récord y también la historia de México al finalizar en la cuarta posición en Tokio 2020. Lo nunca antes visto lo ha logrado Moreno para su país y se ha afianzado como una de las mejores gimnastas mexicanas de toda la historia. Y repetimos estuvo a 17 centésimas de colgarse el bronce.
Alexa Moreno, nacida en Mexicali y de 26 años vistió un traje y mechones rojos en alusión al fuego, se mostró segura en su primer salto. Una ejecución llena de tesón y fuerza que le valió una puntuación de 14.766. En su segundo salto volvió a dar una gran actuación, aunque los jueces lo valoraron un poco menor, 14.66. El promedio de Moreno fue de 14.716. Y, como fue la segunda en saltar, tuvo que esperar con angustia el resultado de sus rivales. La brasileña Rebeca Andrade (15.083) se quedó con el oro, Mykayla Skinner (14.916) la plata y la surcoreana Seojeong Yeo (14.733) el bronce.
”Siento que los jueces fueron un poquito injustos en el primer salto”, dijo. “Este año ha sido especialmente difícil, tuve muchas lesiones e incluso necesito hacerme una operación. No estaba segura de poder llegar”, agregó.
Alexa Moreno ha puesto en la órbita mexicana la gimnasia. El deporte que necesitaba de una referente se encontró a una gimnasta tan potente como carismática. Alexa Moreno enterró toda la polémica que la llevó al foco público en Río 2016. En los Juegos de aquel año fue atacada por insultos que se metían con su aspecto físico. La mexicana no le tomó importancia, aunque su nombre tomó fuerza. Había terminado en un histórico decimosegundo lugar en salto de caballo, pero quería evitar a cualquier cosa ser catalogada como la mexicana atacada por su complexión.
Ella se puso a lo suyo y le hizo caso a las lecciones de su entrenador, el español Alfredo Hueto. Puro trabajo en el gimnasio, sin hacer ruido. Dos años después se colgó la medalla de bronce en el Mundial de Gimnasia. Ninguna mexicana había logrado meterse al podio en un gran torneo en los tiempos de Simone Biles. Moreno le hizo a ver a México que podía confiar en ella y en su potencia.
México ha encontrado dos marcas positivas para la gimnasia. Además del cuarto lugar de Alexa Moreno, Dafne Navarro debutó en gimnasia en trampolín y también se clasificó a la final. Navarro terminó en la octava posición. Con información de El País