«Mi padre fue como siempre a su hemodiálisis, pero se comenzó a sentir mal… ingresó a terapia intensiva y ya nunca salió del Hospital de Pemex» así lo expresó Nahúm Domínguez, hijo de otra persona más fallecida por el suministro de medicamento contaminado en el Hospital Regional de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Villahermosa, Tabasco.
Nahúm Domínguez, acusó que las autoridades del centro médico no mejoraron la atención tras reportarse los malestares por la heparina sódica contaminada que se aplicó a las personas y que incluso no tuvieron voluntad para que se recuperaran satisfactoriamente.
«Mi papá falleció ayer por la tarde… fue de los afectados de la dosis del día jueves 27 de febrero y lo ingresamos a terapia intensiva el 1 de marzo. Fue poco el apoyo que vimos de la empresa, del hospital, de la dirección, nunca vimos que existiera ese compromiso real de sacarlos con vida, de ayudarlos, siempre fue a la ligera todo, nunca nos dijeron ni reconocieron lo que pasaba», afirmó en entrevista con Azucena Uresti para Grupo Fórmula.
Ayer Pemex confirmó otro fallecimiento con lo que la cifra de decesos aumentó a ocho, todos envenenados con un fármaco contaminado que les administraron, el 28 de febrero pasado en ese nosocomio, a derechohabientes que acudieron a su tratamiento de hemodiálisis, aunque Pemex solo reconoce siete.
Culpan a Rodolfo Lehmann, Octavio Romero y José Luis Oramas
Familiares de los derechohabientes fallecidos e infectados han denunciado en medios de comunicación que demandarán penalmente a los tabasqueños Octavio Romero Oropesa, Director de Pemex y a Rodolfo Lehmann Mendoza, subdirector de Servicios de Salud y a José Luis Oramas director del Hospital quienes no han dado la cara a los familiares por este envenenamiento y por la negligencia ocurrida y que todo parece indicar que apunta a una grave corrupción en compra y uso de medicamentos.
Se manifiestan a fuera del Hospital
En el marco del Aniversario de la Expropiación Petrolera, un grupo de trabajadores activos y jubilados de Pemex, junto con familiares de personas fallecidas se manifestaron por los deplorables e inhumanos servicios que se dan en ese nosocomio y donde la aplicación de un medicamento de hemodiálisis contaminado provocó el envenenamiento de decenas de personas y la muerte de al menos nueve personas a decir de los propios manifestantes.