El brote de Coronavirus en Italia ha llegado a Venecia, una de las ciudades con mayor índice turístico del país. El presidente de Véneto, Luca Zaia se ha mostrado muy preocupado y ha anunciado medidas «muy estrictas» para poder limitar los contagios y no sólo en Vo’ Euganeo, donde hay 9 casos confirmados y de donde procedía la primera víctima mortal, sino también en Venecia donde ha decidido cancelar el Carnaval.
Desde este lunes, 24 de febrero, cerrarán en la región de Lombardía las escuelas, universidades, cines y teatros y lugares de reunión en general Se valora cerrar también las tiendas. El número de infectados con el nuevo coronavirus en la región italiana de Lombardía ha aumentado a 89, ha anunciado el gobernador regional, Attilio Fontana. El número total de casos en el país se eleva así a más de 100.
Además, se han confirmado dos casos letales: un hombre de 78 años que falleció en la ciudad de Padua, en la vecina región del Véneto, y una mujer de 77 años en Codogno, en Lombardía, las más afectada por el brote. De esta manera, Italia se ha convertido en el país europeo más afectado por el Covid-19 hasta la fecha. La ciudad de Codogno, en el norte de Italia, donde se confirmaron 14 nuevos casos de coronavirus, ha sido cerrada por las autoridades
Medidas contra la emergencia epidemiológica
Ante la rápida propagación del brote, el Gobierno ha tomado la decisión de aislar a unas 50.000 personas de 11 municipios afectados, donde se han suspendido actividades laborales y escolares, así como los eventos deportivos, incluidos tres partidos de la Serie A.
El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, anunció que se ha adoptado «un decreto legal con medidas para la contención y el manejo de la emergencia epidemiológica» y que «en las áreas de los brotes no se permitirá la entrada ni la salida, salvo excepciones específicas que se evaluarán periódicamente».
La Policía controlará que nadie entre ni salga de esas zonas y, «si es necesario, intervendrán las Fuerzas Armadas», advirtió Conte durante una rueda de prensa, subrayando que el bienestar de los italianos es «lo más importante».