Alejandro Giammattei, presidente de Guatemala, afirmó que el Canciller mexicano, Marcelo Ebrard, le prometió que México frenaría la caravana migrante que partió este miércoles desde Honduras rumbo a Estados Unidos.
«Hoy en la conversación con el Canciller le hicimos la pregunta sobre esa caravana. El Gobierno mexicano nos advirtió que no los va a dejar pasar y que va a utilizar todo lo que esté en sus manos para impedir que pasen», dijo Giammattei a la prensa, luego de una reunión que sostuvo con Ebrard.
El Mandatario guatemalteco advirtió que los migrantes se van a topar con «un muro» que no van a poder «penetrar» cuando lleguen a la frontera mexicana, de acuerdo a las conversaciones con Ebrard.
Una de las medidas para frenar la migración de indocumentados a través de las fronteras de Guatemala, dijo, será la revisión exhaustiva de documentos de menores que acompañan a migrantes para asegurarse de que son sus hijos o están bajo su tutela.
Las autoridades guatemaltecas van a ser «extremadamente exigentes», dijo Giammattei tras advertir que si los migrantes no presentan los documentos, los niños van a ser devueltos a Honduras.
Giammattei asumió el martes en sucesión de Jimmy Morales con el reto de combatir la pobreza, la inseguridad y la corrupción, así como lidiar con el acuerdo migratorio firmado con Estados Unidos por el Gobierno saliente que obliga a la nación a recibir a migrantes extranjeros que soliciten asilo.
Cada año miles de migrantes, sobre todo procedentes del llamado Triángulo Norte que integran El Salvador, Guatemala y Honduras, salen de su país de donde aseguran huyen de la violencia y la pobreza.
En 2018 grandes caravanas de centroamericanos intentaron llegar en masa a Estados Unidos, a través de México, para buscar asilo. Pero la mayoría fueron rechazados o bien esperan su cita ante una corte estadounidense, desde territorio mexicano, a través del acuerdo de Protocolos de Protección a Migrantes (MPP, en inglés).
Desde el comienzo de su mandato, el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha buscado mecanismos para frenar la inmigración de indocumentados a su país y evitar que sigan creciendo las solicitudes de asilo, especialmente de centroamericanos.