Audios del servicio de mensajería Messenger de los usuarios de Facebook fueron escuchados y transcritos por cientos de contratistas externos a quienes la red social pagó para hacer el trabajo, denunciaron fuentes a Bloomberg y quienes solicitaron el anonimato por temor a perder sus trabajos. Los empleados deben incluso escuchar audios con contenido vulgar, pero desconocen los motivos de la red social para quererlos transcritos.
La situación, según las fuentes, inquieta a los empleados, a quienes no les dicen dónde se hizo la grabación o cómo se obtuvo. De acuerdo a información periodística de ese medio de comunicación estas personas están escuchando las conversaciones de los usuarios de Facebook, a veces con contenido vulgar, pero no saben por qué Facebook necesita transcribirlas, dijeron.
La semana pasada, la Comisión de Protección de Datos de Irlanda, que lidera la supervisión de Facebook en Europa, dijo que estaba examinando la actividad por posibles violaciones de las estrictas normas de privacidad de la Unión Europea. Por este motivo las acciones del gigante de las redes sociales cayeron un 1.3%.
Sobre el tema, Facebook confirmó que había estado transcribiendo audios de usuarios y dijo que ya no lo hará. “Al igual que Apple y Google, detuvimos la revisión humana del audio hace más de una semana”, dijo la compañía en el día de ayer.
La compañía agregó que los usuarios afectados eligieron la opción en la aplicación Messenger de Facebook, donde permiten que se transcriban sus chats de voz. Los contratistas estaban verificando si la inteligencia artificial de Facebook interpretaba correctamente los mensajes, que fueron utilizados anónimamente.
Compañías como Amazon.com Inc. y Apple Inc., han sido criticadas por recopilar fragmentos de audio de dispositivos informáticos de consumo como Alexa, Siri y otros, y someter esos clips a revisión humana, una práctica que los críticos dicen que invade la privacidad.
Hace poco, Facebook acaba de lograr un acuerdo de 5,000 millones de dólares con la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos, después de una investigación de sus prácticas de privacidad, durante mucho tiempo negó que recopile audio de los usuarios para informar anuncios o ayudar a determinar lo que la gente ve en sus noticias.