La organización El Poder del Consumidor emitió una alerta sobre los riesgos asociados con el consumo del Yogurt Lala Fresa, destacando los peligros de ciertos aditivos y el exceso de azúcares presentes en este producto.
El yogurt, que se presenta como una opción saludable, contiene ingredientes y cantidades de azúcar que podrían tener efectos adversos para la salud.
El análisis de una taza de 250 gramos del Yogurt Lala Fresa reveló que contiene 26.8 gramos de azúcares, lo que equivale a casi 5.5 cucharadas cafeteras de azúcar. Esto representa el 53.6% de la ingesta diaria recomendada para adultos y el 67% para niños, según las directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Además, si se sigue la recomendación de reducir el consumo de azúcares añadidos al 5% de las calorías diarias, una taza cubriría el 107.2% de la cantidad diaria para adultos y el 134% para infantes.
El Poder del Consumidor también señaló la presencia de jarabe de maíz de alta fructosa (JMAF) en el producto, un endulzante con impactos negativos conocidos para la salud, como:
Hipertrigliceridemia (mayor grasa en sangre)
Hipercolesterolemia (colesterol alto)
Hiperuricemia (ácido úrico elevado)
Hipertensión (presión alta)
Hígado graso
Gota
Resistencia a la insulina
Además, se han observado efectos nocivos en modelos animales, incluyendo daño renal. La alta cantidad de fructosa presente en el JMAF puede contribuir al aumento de peso, obesidad, y mayores riesgos de desarrollar diabetes tipo 2.
El producto contiene 16 ingredientes, entre los cuales se destacan dos aditivos que han generado preocupaciones de salud:
Carragenina: Un aditivo natural que ha sido relacionado con inflamación intestinal, sangrado y cáncer de colon.
Rojo Allura (Rojo 40): Un colorante asociado con hiperactividad y déficit de atención en niños, además de ser vinculado a inflamación del colon y daños en el ADN en modelos animales.
El análisis también resaltó la publicidad engañosa del producto. A pesar de mostrar en la etiqueta la leyenda “Yogur con trozos de fresa”, este sólo contiene un 15% de “preparado de fresa”, compuesto por varios ingredientes adicionales. Además, el sello de “Exceso en Azúcares” se muestra únicamente en la tapa, lo que reduce su visibilidad.
La organización recomendó evitar el consumo de este yogurt y optar por opciones sin aditivos ni altos niveles de azúcares añadidos. Además, se destacó la importancia de que las etiquetas de los productos sean claras y legibles, para que los consumidores puedan tomar decisiones informadas sobre su alimentación.