Después de rechazar el debate de todas las reservas presentadas por la oposición y de negarse a cambiar siquiera una coma, Morena y sus aliados aprobaron en lo general y en lo particular la miscelánea fiscal de 2022, la cual incluye reformas polémicas, como la disminución a los donativos a las asociaciones de la sociedad civil y la obligatoriedad de inscripción al RFC a los jóvenes mayores de 18 años.
El pleno del Senado también aprobó en lo general la Ley de Derechos con 68 votos a favor, 44 en contra y una abstención, y se aprestaba a votar por la madrugada la Ley de Ingresos de 2022.
Un total de 48 senadores presentaron sus reservas, pero se modificaron los proyectos de ley que les envió la Cámara de Diputados.
Asimismo, con 67 votos a favor y 43 en contra, el pleno del Senado de la República aprobó, en lo general, reformas a diversas disposiciones de las leyes del ISR, del IVA, del IEPS, del ISAN y del Código Fiscal de la Federación.
Los legisladores de oposición lamentaron lo que calificaron como medida visceral de persecución a dos familias, ‘que probablemente abusaron de las deducciones’, y que por ello se afecte a 2.8 millones de mexicanos que reciben beneficios de las organizaciones de la sociedad civil, por la asfixia financiera que les provocará la limitación de los donativos, de personas físicas, a un tope de 163 mil 467 pesos, a partir de 2022.
Sylvana Beltrones, senadora por el PRI, expresó que la limitación a los donativos “vulnera la viabilidad financiera de la sociedad civil organizada para combatir problemas como cáncer, VIH, el desabasto de medicamentos, atención a mujeres y menores en situaciones de violencia, los migrantes, para la rehabilitación y readaptación”.
Nancy de la Sierra, del Grupo Plural, pidió no modificar el artículo 151 de la Ley del ISR ya que se afectaría a 7 de las 10 organizaciones que protegen a víctimas de trata en el país, que no reciben recursos del gobierno.
Noé Castañón, de Movimiento Ciudadano, expuso que la modificación fiscal sobre los donativos afecta el principio de generalidad, pues la medida va dirigida a dos familias, pero se afecta a todo el esquema.
Otros cambio polémico es la denominada modificación del artículo 96 del Código Fiscal que criminaliza a los contadores que realizan dictámenes fiscales y que no informen a la autoridad de un probable delito de la empresa que auditen; se les sancionará por encubrimiento con prisión de tres meses a seis años.
La miscelánea fiscal incluye en la Ley del ISR un Régimen Simplificado de Confianza, que entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2022, cuyo objetivo es la simplificación de las obligaciones fiscales para las personas físicas con actividades empresariales, con ingresos de hasta tres millones 500 mil pesos.
Además, el dictamen prevé disminución de la tasa del IVA del 16 al 0 por ciento a las toallas sanitarias, tampones y copas para la gestión menstrual; reduce también con la misma tasa impositiva los alimentos para animales y productos agrícolas y ganaderos.
Nuvia Mayorga, del PRI, advirtió que se está vulnerando al campo: “si en la actualidad el estímulo fiscal a los pequeños productores del sector agrícola, ganadero, silvícola y pesquero, les permitía exentar el pago del ISR cuando sus ingresos no superaban 1.3 millones de pesos y en lugar de subirlo a 1.5 millones, fue al revés, se redujo a 900 mil pesos; no podemos afectar de esta manera al campo”.
Víctor Fuentes, del PAN, advirtió que al aumentar los impuestos a los productos agrícolas se elevarán los precios de sus productos.
Ana Lilia Rivera, de Morena, dijo que el paquete es una verdadera revolución fiscal. Dijo que la modificación del ISR beneficiará al 96 por ciento de las personas morales. La senadora morenista Lucía Meza resaltó que la Ley de Ingresos del próximo año, se inserta “en el marco de una estrategia diseñada y orientada a la recuperación económica y que continúa con la prudencia fiscal que ha sido reconocida por diversas calificadoras e inversionistas y que contribuye a la estabilidad macroeconómica del país”. Con información de El FInanciero.