El desplome del tramo elevado de la Línea 12 del Metro de la Ciudad de México, que ocurrió el pasado 3 de mayo y que provocó la muerte de 26 personas, fue resultado del pandeo de las vigas norte y sur facilitado por la falta de pernos funcionales en una longitud significativa, así lo determinó la empresa noruega Det Norske Veritas (DNV) en la Fase 2 del dictamen elaborado que entregó a la Secretaría de Gestión Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil del Gobierno de la Ciudad de México.
“Como resultado, la estructura compuesta estaba operando como dos vigas paralelas independientes, una viga de concreto y una viga de acero, que experimentaron condiciones de carga para las que no estaban diseñadas.
“Lo anterior creó condiciones que llevaron a la distorsión del marco transversal central y la iniciación y propagación de grietas de fatiga que redujeron aún más la capacidad de la estructura para soportar la carga”, expone el dictamen técnico final sobre las causas de la tragedia.
El resumen ejecutivo del documento elaborado por la empresa noruega contratada ex profeso por las autoridades capitalinas fue leído en conferencia de prensa por Jesús Esteva Medina, secretario de Obras y Servicios del Gobierno de la Ciudad de México, en la que no se permitieron preguntas.
La titular de la Secretaría de Gestión Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, Myriam Urzúa Venegas, explicó que el documento entregado por DNV consta de 180 páginas.
Eckhard Hinrichsen, director general de DNV México, explicó que de forma independiente se entregará el «análisis de causa raíz» de la Fase 3, el cual determinará los controles, sistemas, prácticas y procedimientos que fallaron al prevenir que ocurrieran los mecanismos de falla.
Si deseas conocer el documento completo del dictamen Fase 2 sobre el colapso del tramo elevado del viaducto de la Línea 12 del Metro, entregado por la empresa DNV, puedes acceder aquí.