Después de que se confirmó oficialmente el primer caso de Covid-19 de la variante Lambda en el estado de Colima y el segundo caso en la Ciudad en México, ésta se suma a las diversas variantes, como Delta o Gamma, que circulan ya en el territorio nacional, pero, ¿Qué es y en qué se diferencia de Delta?
La variante Lambda o C.37, es una mutación de la cepa original de SARS-CoV-2 y fue registrada por primera vez en Perú en el 2020, está catalogada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una ‘variante de interés’. Por otro lado las variantes Alfa, Beta, Delta y Gamma, pertenece a la categoría de ‘variantes de alta preocupación’.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) expuso que no hay evidencia sobre un comportamiento agresivo de Lambda. Aunado a esto, la OMS coincide en que no hay indicios de que pueda volverse dominante.
“Hasta el momento, no existe evidencia que permita inferir un comportamiento más agresivo o severo, aunque es posible que tenga una capacidad de transmisión aumentada”, dijo el Gerente de Incidentes de la OPS, Sylvian Aldighieri.
En cuanto a su presencia, la OMS ha dado a conocer que Lambda se ha detectado en 40 países regiones; no obstante, Delta ya se ha detectado en 132 países.
Pese a que en la actualidad se sigue estudiando con detenimiento, algunos estudios han reportado que Lambda comparte algunas mutaciones con otras variantes del SARS-CoV-2, que la hacen más transmisible en comparación con la cepa original, pero menos que Delta.
En el estudio ‘La variante Lambda del SARS-CoV-2 exhibe mayor infectividad y resistencia inmune’, científicos japoneses sugieren que la mutación hallada en Perú podría ser considerada una amenaza potencial para la humanidad.
Esto debido a que es responsable del fenotipo virológico que puede asociarse con la propagación de la infección masiva, principalmente en países de América del Sur.
Pablo Tsukayama, microbiólogo de la Universidad Cayetano Heredia en Perú que documentó el surgimiento de Lambda, aseguró que dicha variante fue descubierta en junio de 2020, sin embargo, ha sido Delta la que ha demostrado ser más transmisible, tras ser identificada en diciembre de 2020, medio año después.