Ya no habrá más clavados olímpicos para Rommel Pacheco que anunció su retiro, cerrando así un gran ciclo y en Japón lo sabían. Así que en Tokio se rompió el protocolo durante la final de clavados del trampolín de tres metros en la última ronda. Y eso quebró al histórico clavadista mexicano Rommel Pacheco que recién salía de la alberca para recibir una ovación al haber ejecutado el último clavado de su brillante carrera profesional como deportista.
El que fue el abanderado de la representación mexicana no pudo contener las lágrimas al escuchar los aplausos como un gran reconocimiento de todos los presentes en el Centro Acuático de Tokio y al encontrarse con Ma Jin, su entrenadora, el llanto brotó al saber que lo ganó prácticamente todo en esta disciplina.
Que manera tan digna de cerrar su carrera deportiva, Rommel Pacheco puso el nombre de México en alto, con 14 medallas en su haber, el oriundo de Mérida, Yucatán, solo se quedó con la espina de tener en sus manos una medalla olímpica. Tokio 2020, sus cuartos Juegos Olímpicos, parecía el escenario ideal para tener un cierre con broche de oro tal vez con una medalla de bronce, era difícil los chinos siempre han dominado e hicieron el uno y dos. Además los británicos como siempre venía muy fuertes. Aun así Rommel luchó e incluso por momentos rozó esa posibilidad, pero un fallo en su quinto clavado de un total de seis lo alejaron de la zona del podio y aún así terminó en sexto lugar en la tabla general.
El homenaje que le rindió la comunidad entera de clavadistas, que coincidió con el retiro del japonés Ken Terauchi, dio cuenta de que el espíritu olímpico premia el respeto y dedicación que por 25 años le ofreció a este deporte. No se llevó una presea pero se va quedando entre los diez mejores del mundo, lo cual quizás no se compara con el ejemplo que le dio a varias generaciones.
El oro y la plata fueron para Siyi Xie y Zongyuan Wang, respectivamente, ambos representantes de la República Popular de China, mientras el bronce se lo llevó Jack Laugher de la Gran Bretaña, haciendo patente que en materia de clavados el país asiático ha tomado un dominio total y es prácticamente imposible vencerlos.
Aun así este 03 de agosto permanecerá en la memoria ese último clavado de Rommel Pacheco que superó incluso los 96 puntos de calificación de tan bueno que fue. Nos quedaremos con ese último chapuzón de Rommel Pacheco que sacó lágrimas y aplausos en muchos rincones del mundo.
«Y al final de mis años como deportista aprendí a disfrutar el camino… Me voy pleno y feliz porque siempre di todo de mi. Gracias a toda la gente de México por tanto cariño #Tokyo2020 #juegosolimpicos» escribió en sus redes sociales agradeciendo Rommel, todo el apoyo recibido.