El consumo del queso a nivel mundial es prácticamente generalizado, se consume en distintas formas y presentaciones. Hay personas que son amantes de este alimento y lo acompañan con todo, pero en este rubro además de quesos gourmet hay quesos de lujo.
Pero ¿Qué hace que un queso sea considerado de lujo? Al igual que sucede con los licores, el queso se añeja y esto le aporta valor. Pero no es solo eso, el proceso para su elaboración e incluso sus ingredientes agregan valor a los quesos. Si algo tienen en común, los quesos de lujo es que son tan caros como extraños.
En Italia se prepara uno de los quesos más caros del mundo. Se trata del Casu Marzu, un queso de oveja cuyo ingrediente principal son las larvas. Estos animales ingieren o absorben toda la grasa del queso y le dan una consistencia muy suave que no se halla en otro tipo de queso.
En Italia es un queso tradicional y su nombre significa «queso podrido». Lo más curioso es que esta venta está prohibida en toda la Unión Europea y esas prohibiciones lo han encarecido.
Otro queso de lujo es el queso Pule. Este es original de Serbia y está hecho a base de leche de burras, lo que es muy difícil de conseguir. Además, este tipo de leche es muy baja en grasa, así que para preparar solo un kilo de Pule se necesitan 25 litros de leche de burra
Solo se fabricaba en Serbia, hasta que una granja en Madrid decidió aventurarse a su preparación. El kilo de Pule cuesta alrededor de los 1,000 euros, pero hay registros de ventas de un kilo hasta en ,.000 euros.
El tercero, es el queso de Oro Stilson. Algo que nadie se imaginaría, ya que es un tipo de queso que tiene oro comestible. También es considerado de los más caros del mundo con un precio mayor a los 700 euros por kilo.
Es un queso común en la gastronomía inglesa sólo el queso producido en Derbyshire, Leicestershire, y Nottinghamshire puede ser denominado “Stilton”. Es una receta muy exclusiva. Tiene dos opciones, azul y blanco y su tiempo mínimo de añejamiento es de 9 semanas. ¿Y tu los probarías? Con Información de la Razón España