La Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE), de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), le recordó a México que es firmante de tratados internacionales que contemplan que la mariguana solo se puede comercializar por motivos médicos.
“Esperamos que el Congreso mexicano tome en cuenta esos factores y haya una ley (de consumo de cannabis) que cumpla los acuerdos internacionales“, dijo a Efe Raúl Martínez del Campo, miembro experto independiente de la JIFE.
A raíz de un mandato de la Suprema Corte de Justicia, el Congreso mexicano está tramitando una ley para regular el consumo lúdico de mariguana en el país, que busca crear un mercado legal de cannabis y combatir la crisis por el narcotráfico.
La JIFE, encargada del cumplimiento de los tratados antidrogas, publicó su informe anual sobre estupefacientes en el que se declara “preocupada por las novedades legislativas de varios países en lo que respecta al consumo con fines no médicos del cannabis”, entre ellos México.
Martínez del Campo explicó a Efe que la JIFE es “muy sensible” respecto a la situación de violencia que sufre México a raíz de “la guerra contra las drogas” y reivindicó que “no se debe criminalizar” a los consumidores de mariguana.
Pero también recordó que México es firmante de la Convención Única de Estupefacientes de 1961, que establece que el cannabis solo puede utilizarse con fines “médicos o científicos”.
Dijo que la JIFE mantendrá “un diálogo constante” con las autoridades mexicanas y aseguró que el director ejecutivo de la UNODC, Yury Fedotov, pretende visitar México en cuanto la pandemia lo permita. Con información de Forbes