Un submarino alemán de la Primera Guerra Mundial hundido en 1917 ha sido inspeccionado por primera vez utilizando escáneres y video de alta mar; los científicos utilizaron sofisticadas técnicas de escaneo y secuencias de video de aguas profundas para investigar los restos del UC-47, encontrado a unas 20 millas náuticas de la costa de Yorkshire en el Mar del Norte.
El equipo de inspección dijo que a la UC-47 se le atribuyó el hundimiento de más de 50 embarcaciones en su carrera de un año y tenía la reputación de ser una embarcación afortunada dentro de la Armada Imperial Alemana, pero el 18 de noviembre de 1917, la lancha patrullera de la Royal Navy HMS P-57 la sorprendió en la superficie, embistiéndolo, y el submarino se hundió con todas sus fuerzas.
Dirigido por el experto en arqueología de aguas profundas, el Dr. Rodrigo Pacheco-Ruiz, de la Universidad de Southampton, en colaboración con las empresas de prospección en alta mar MMT y Reach Subsea, el equipo investigó el naufragio en nombre de Tolmount Development durante las operaciones en alta mar para prepararse para la colocación de un nuevo oleoducto en el Mar del Norte.
Utilizando robótica de última generación y equipo geofísico de alta resolución, los restos del naufragio, que se encuentran 50 metros debajo de la superficie, fueron mapeados e inspeccionados en detalle y mostraron un nivel «asombroso» de preservación, agregó el equipo.
Los arqueólogos dijeron que los restos del casco principal, que estaba intacto en toda su longitud, eran visibles sobre el lecho marino y el daño que sufrió durante su hundimiento era evidente.
Un gran agujero en el costado de babor del casco era indicativo de una explosión y esparcidas por el lugar del naufragio había partes de la embarcación, incluido uno de los tubos de torpedos, agregaron. El Dr. Pacheco-Ruiz, codirector del proyecto de Investigación Arqueológica Offshore (OAR) del Centro de Arqueología Marítima, dijo: «Hoy la embarcación solo está marcada en las cartas de navegación como un naufragio y hasta ahora se sabía muy poco de su condición.
«Ha sido un privilegio poder explorarlo en tan buenas condiciones y tener la oportunidad de descubrir más sobre su pasado». Los arqueólogos esperan que sea posible regresar a los restos del naufragio en el futuro, para reunir más evidencia sobre su pasado y ayudar a capacitar a los estudiantes en arqueología marítima.