Después de maltratos, un cuidado que dejo mucho que desear, y tras un viaje de más de 2 mil kilómetros desde el Parque Central de Ciudad Juárez hasta Puebla, que además incluyó una semana de adaptación, el personal del Africam Safari liberó a Benito para que conociera a las demás jirafas del parque de conservación y empezara a convivir con la especie, lugar en el que será el semental de la manada.
Los encargados del parque prepararon un pastel con alfalfa, manzana y zanahoria para que Benito se reuniera con su nueva familia y empezara a convivir en un ambiente de tranquilidad y de manera positiva al consumir el alimento.
Uno de los encargados de todo el operativo, se encargó de atraer a Benito con manzanas para acercarlo al rebaño e ir evaluando la actitud y evitar peleas.
Benito hizo su primer encuentro de manera tranquila y luego se acercó a consumir el pastel que Africam Safari preparó en su honor. Se alimentó junto al rebaño y en sana convivencia conoció a las hembras de especie.
Durante el acoplamiento del rebaño, el personal especializado de Africam Safari explicó que es muy fácil distinguir a Benito de las demás jirafas, ya que es el animal que tiene la cola más larga y tiene las manchas más obscuras.
Este es el menú y la salud de Benito
Gregory Camacho, director de Desarrollo de Africam Safari, dijo que de las principales tareas para mejorar la vida de Benito fue cambiar la alimentación por acacias africanas, unas plantas especiales para jirafas.
Minutos antes de que Benito fuera introducido con las demás jirafas, Camacho explicó que se ha visto un cambio increíble en la actitud del nuevo habitante, los ojos mucho más abiertos, oliendo todo el entorno, lamiendo las paredes y buscando a las hembras.
El nuevo habitante de Africam Safari tenía parásitos en los intestinos desde su estancia en Ciudad Juárez, pero al llegar a su nuevo hogar se le hicieron pruebas y fue desparasitado.
Gregory afirmó que en estos momentos Benito está en estado óptimo de salud y más que listo para incorporarse a su nueva familia.
Durante la explicación del tratamiento para estar seguros de que Benito no tuviera enfermedades que pudieran afectar a las demás especies, el personal del parque informó que en ese lugar se cuida con amor y pasión a 7 mil 500 animales.