El juez argentino Claudio Bonadio pidió prisión preventiva contra Cristina Fernández de Kirchner, al ser acusada de haber recibido sobornos de empresarios de obra pública. La causa de los cuadernos de la corrupción llevaría a la ex presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner a la cárcel pero por ser senadora goza de inmunidad. Este día un juez procesó con prisión preventiva a Fernández de Kirchner acusada de encabezar una asociación ilícita que tenía como objetivo recaudar millonarios sobornos de empresarios de obras públicas. El juez Claudio Bonadio la acusó también de haber cometido los delitos de cohecho pasivo y dádivas en reiteradas ocasiones.

El problema es que la posible detención de la ex presidenta sólo será posible si dos tercios de los senadores aprueban su desafuero, una posibilidad que hoy parece muy lejana. La coalición gobernante Cambiemos está en minoría en la Cámara Alta y el jefe del peronismo federal, Miguel Ángel Pichetto, ha descartado hasta ahora esa posibilidad.

En su resolución, el juez Claudio Bonadio consideró la existencia de «una organización delictiva conformada por funcionarios públicos, quienes valiéndose de medios oficiales (incluyendo vehículos, empleados, equipos de telefonía celular, etcétera) y comandados por Néstor Carlos Kirchner y Cristina Elisabet Fernández, y del Ministerio de Planificación [encabezado por Julio de Vido], actuó entre los años 2003 y 2015.