En Guatemala, la caravana de migrantes que salió de Honduras hace unos días con el propósito de llegar a Estados Unidos fue desintegrada. El gobierno de ese país centroamericano anunció la repatriación de unos 2,400 hondureños que habían ingresado a su territorio de manera ilegal.
En el territorio guatemalteco la Policía Nacional Civil logró contener a grupos de migrantes. Fuerzas públicas encapsularon a un grupo en la casa del migrante, a donde llegaron a pedir ayuda humanitaria y otros más en las terminales de autobuses.
A los hondureños que llegaron a la casa del migrante ya no les permitieron moverse a otro lugar, sino que tuvieron que subir a los autobuses puestos por el Gobierno de Guatemala para retornar a sus lugares de origen.
«Llamaron los militares que nos quiere garrotear, nos van a llevar de vuelta para allá, está perro, está feo así, gastar pisto de puro gusto, está feo así», dijo Luis Antonio Martínez, migrante hondureño.
«Tenemos que definir la política migratoria, porque no es una migración como las de otros años. Aquí está en riesgo la vida de muchísima gente y lo que quieren los tres gobiernos, más el gobierno mexicano que no haya ningún contagio más, ya que en este caso Guatemala ha cerrado siete meses su frontera, México igual, Honduras igual, primero que nada decisión sanitaria», comentó Mauricio Ituarte, cónsul de Honduras en Tapachula.
El Gobierno de Guatemala y el de México indicaron que todos los ciudadanos extranjeros que ingrese a sus territorios deberán aplicarse una prueba rápida PCR para detectar si son portadores de alguna enfermedad como covid-19 y dengue.
De acuerdo con el Gobierno de Guatemala, dos mil 159 personas fueron remitidas y retornadas a su país de origen. El grupo más numeroso fue asegurado en Izabal cuando se dirigían al norte de Guatemala para buscar ingresar a México por Tenosique, Tabasco, y el resto fueron asegurados en el sur de Centroamérica
También son perseguidos en México
Y no solo en Guatemala, también en México los operativos del Instituto Nacional de Migración continúan, por lo que un grupo de migrantes de origen guatemalteco que caminaban por la calles del municipio de Suchiate, Chiapas, fueron perseguidos y asegurados por los elementos migratorios. «No hacemos daño a nadie, somos de Guatemala, vamos para arriba», justificó un migrante.
#Boletín ? @Guate_Mex, @BucaroMario, @SSaludChiapas, @INAMI_mx, @SRE_mx, @SEDENAmx, @GN_MEXICO_, y @SEMAR_mx, supervisan operativo de 24 horas desplegado en la frontera sur, del río Suchiate, #Chiapas a El Ceibo, #Tabasco. ?? https://t.co/AeccJ41RtJ pic.twitter.com/rVMsmElFPM
— INM (@INAMI_mx) October 5, 2020
En tanto, en redes sociales el Instituto Nacional de Migración (INM), dependiente de la Secretaría de Gobernación, las secretarías de Relaciones Exteriores (SRE), de la Defensa Nacional (Sedena), de Marina (Semar), así como la Guardia Nacional (GN), los gobiernos estatales de Chiapas y Tabasco, y la Embajada de Guatemala en México, anunciaron acciones para garantizar (y reforzar la seguridad) un flujo migratorio seguro, ordenado y regular en la frontera sur del México.
El comisionado del INM, Francisco Garduño Yáñez, en compañía del embajador de Guatemala en México, Mario Adolfo Búcaro Flores; el secretario de Salud del estado de Chiapas; el director general de la Subsecretaría para América Latina y el Caribe de la SRE, Martín Borrego Llórente; mandos de la Sedena, Semar y GN supervisaron el operativo de 24 horas desplegado a lo largo del río Suchiate, en Chiapas, el cual se mantiene instalado hasta El Ceibo, Tabasco.
Ahí el embajador de Guatemala, Mario Adolfo Búcaro, mandó un mensaje a los migrantes: «Nuestro mensaje es muy claro para todos los que deseen migrar ¡Quédense en casa! Es el momento de hacerlo en medio de la pandemia. Los gobiernos de Guatemala y de México trabajamos unidos», expuso.