El papa Francisco habría expulsado al reverendo Cristian Precht de Chile, según una declaración de la Arquidiócesis de Santiago. Esta seria la primera renuncia formal que el papa ha decretado desde que todos los obispos en Chile ofrecieron renunciar en mayo por el escándalo de abuso sexual en el país. Se cree que el movimiento no tiene precedentes en la historia moderna de la Iglesia católica. Precht había sido suspendido en 2012 durante cinco años después de que el arzobispo de Santiago ordenara una investigación criminal sobre las acusaciones de abuso sexual contra él. El arzobispo emitió una declaración en el momento diciendo que «durante el proceso se establecieron informes verificables de comportamiento abusivo con adultos y menores”.

Precht no ha sido acusado de ningún delito por parte de las autoridades chilenas, pero no se le permitió salir de la capital del país, Santiago, a la espera de que se complete la investigación de la iglesia. En una declaración de febrero de 2013, Cristian Precht negó «forzar jamás la voluntad de nadie, ya sea un adulto o un menor, mujer u hombre”. Precht era extremadamente popular en Chile y conocido por ser un feroz defensor de los derechos humanos durante la dictadura chilena. Su expulsión del sacerdocio se produce cuando la Iglesia católica continúa enfrentando críticas por su respuesta a innumerables acusaciones de abuso sexual contra el clero católico a lo largo de los años. En una carta dirigida al director del diario chileno La Tercera, Precht negó absolutamente participar, de alguna manera, en los actos de los que “me acusan calumniosamente” y agregó “Defenderé mi honor personal y clerical en todas las formas que pueda y cada vez que se viole».