En los últimos 200 años se ha debilitado y desplazado el polo norte magnético, no obstante, en las últimas décadas ese desplazamiento se ha ido acelerando alcanzando una velocidad de hasta 48 kilómetros por año. Esto deja una cosa clara, algo extraño le esta sucediendo al campo magnético de la Tierra.
Tenemos evidencia de que nuestro campo magnético existe desde hace al menos 4 mil millones de años y de que los polos de la Tierra se han invertido varias veces. Solo durante los últimos 2.6 millones de años el campo cambió al menos 10 veces; el más reciente sucedió hace 780 mil años, por lo que algunos científicos creen que vamos tarde para otro cambio.
El campo magnético de la Tierra es generado por medio del hierro fundido en el núcleo del planeta, a 2 mil 896 kilómetros debajo de nuestros pies. Este líquido genera una serie de corrientes eléctricas y estas a su vez producen nuestro campo.
Según la revista Astronomy, los científicos que están estudiando estos cambios siguen sin estar seguros de las consecuencias exactas de la reversión, pero saben que pueden llegar a ser graves.
De los grandes afectados podrían ser una serie de especies de animales como: las ballenas, los peces y las aves, ya que todos estos utilizan el campo electromagnético de la Tierra para navegar durante su período migratorio.
Por otra parte muchos geólogos señalan que las extinciones masivas parecen estar relacionadas con los períodos que conducen a una inversión en los polos.
El efecto directo en el ser humano podría ser leve, pero tendría un efecto contrario para la tecnología y es que los satélites artificiales que usamos para navegar, telecomunicaciones, previsiones meteorológicas, entre otras muchas cosas, se podrían ver seriamente afectados sin la protección que otorgan los campos electromagnéticos.
“Independientemente, la gravedad de una inversión magnética dependerá de cuánto tiempo tarde en completarse la inversión. Si cambia lentamente durante muchos miles de años , es posible que las criaturas migratorias, y también la humanidad, puedan adaptarse. Mientras tanto, tenemos mucho que aprender sobre lo que está sucediendo en las profundidades de nuestro planeta.” concluyen las investigaciones.
Ya ocurrió una cambio en los polos y fue un apocalipsis
En febrero de 2021, la revista revista Science publicó una investigación, en ella expuso que hace 42.000 años, el mundo experimentó unos siglos de condiciones apocalípticas provocadas por una inversión de los polos magnéticos de la Tierra combinada con cambios en el comportamiento del Sol.
Esta última gran inversión geomagnética desencadenó una serie de eventos dramáticos que tuvieron consecuencias de gran alcance para nuestro planeta. Fueron como la trama de una película de terror: la capa de ozono fue destruida, las tormentas eléctricas arrasaron los trópicos, los vientos solares generaron espectáculos de luces (auroras), el aire ártico se derramó sobre América del Norte, las capas de hielo y los glaciares aumentaron, y los patrones climáticos cambiaron violentamente.
Durante estos eventos, la vida en la Tierra estuvo expuesta a una intensa luz ultravioleta. Los neandertales y la megafauna se extinguieron, mientras que los humanos modernos buscaron protección en las cuevas.
Por razones que aún no están del todo claras, los movimientos de los polos magnéticos a veces pueden ser más extremos que un tambaleo. Y fue precisamente una de las migraciones más dramáticas de estos polos la que tuvo lugar hace unos 42.000 años y que se conoce como el evento de Laschamps, el nombre del pueblo donde fue descubierto en el Macizo Central de Francia; y en donde se detectaron anomalías geomagnéticas descubiertas en la década de 1960 en los flujos de lava de Laschamps en Clermont-Ferrand, Francia.
El evento de Laschamps ha sido reconocido en todo el mundo, incluso recientemente en Tasmania, Australia. Pero hasta ahora, no estaba claro si tales cambios magnéticos tuvieron algún impacto en el clima y en la vida en el planeta. Con información de Astronomy y Science.